La Audiencia Nacional anula la reducción salarial que el periódico El País quiso imponer a sus trabajadores

La Sala de lo Social de la Audiencia Nacional ha atendido la demanda de la Federación de Servicios a la Ciudadanía de Comisiones Obreras y del Comité Intercentros de Ediciones El País en la que se reclamaba que no se aplicara una reducción salarial que venía sufriendo una parte de la plantilla.

La sentencia considera que el hecho de que la empresa aplicase esa reducción a un tercio de la plantilla supuso una vulneración del Convenio Colectivo y constituyó un claro fraude de ley y manifiesto abuso de derecho, que vulnera el derecho a la igualdad. 

Los hechos se remontan a enero de 2013 cuando el Comité de Intercentros de Ediciones El País y Comisiones Obreras pactaron, en acuerdo judicial, una reducción salarial media del 8% que afectaba a toda la plantilla de Convenio con salarios superiores a 33.000 euros brutos anuales. Este acuerdo luego se prorrogó en la firma del convenio suscrito en 2016 por el cual 22 colaboradores pasaban a ser de plantilla.

Sin embargo, en marzo de 2017, el Comité recibió información de que este acuerdo no se cumplía en toda su extensión y del mismo la empresa había descolgado distintos trabajadores que por su cuantía salarial debían estar sujetos a él. La empresa se negó a facilitar al Comité la información detallada de a quiénes se practicaba la reducción; por lo cual solicitó a la Audiencia Nacional que obligase a la compañía a aportar dicha información. Así se reveló que un tercio de los afectados había sido arbitrariamente excluido de la reducción.

En un comunicado, CCOO afirma que «una vez más la dirección de Prisa y El País vuelven a demostrar su absoluto desprecio a la legalidad, vulnerando de nuevo los acuerdos alcanzados con la representación de la plantilla, en este caso representados por CCOO, que seguirá defendiendo los derechos de  los trabajadores y las trabajadoras por todos los medios a su alcance y no cejará en denunciar cualquier ilegalidad».

A la par que empeora las condiciones laborales de sus trabajadores, el diario El País lleva años despidiendo periodistas y  colaboradores que no se adecúan a su línea editorial. El último caso sonado fue el del periodista británico John Carlin, que colaboraba desde 2004 con dos columnas semanales y, en lo referido a Catalunya, mantenía una posición diferente a la de El País. Como ejemplo, su último artícul titulado “El Brexit y el lío catalán”, donde hizo alusión al papel del PP, así como al de “sus correligionarios en los medios” como acicates del independentismo catalán.

Otro escandalosos caso reciente, el de los periodistas Manuel Altozano y Rafael Méndez, que se marcharon en 2015 tras acusar a la dirección del periódico de modificar y censurar una noticia sobre Soraya Sáenz de Santamaría, su marido Iván Rosa y Telefónica para no molestar a Moncloa