Mario Erre •  Opinión •  27/06/2017

Nuestra lucha, nuestras normas

Un  año mas, con la llegada del Orgullo, nos encontramos con la discusión bizantina de siempre: ¿Qué fue antes? ¿las manifestaciones por los derechos LGTBI o las carrozas pobladas a partes iguales por hombres desnudos o semidesnudos,  mujeres trans y/o cisgénero mostrando las tetas y música petarda al todo volumen destrozando tímpanos y medio ambiente, ambiente entero en este caso. Discusión esta inseparable del colapso de las centralitas del sentido común con personas preguntando por que no se celebra el Orgullo hetero.

Vayamos por partes. Con respecto al los hombres ligeros de ropa se me ocurre que, tal vez, estar a cuarenta grados de temperatura no invita precisamente a ir ataviado con escafandra, y además cualquiera que conozca el ambiente gay sabrá de la milenaria tendencia del gay masculino y casi que del género masculino en general a desnudarse a la primera que puede, por lo que no habría motivo para no hacerlo justamente el día grande. Argumento este que doy quizás frívolo, como frívola es la indignación ante la visión de carrozas con señores y señoras desnudas. No se indigne usted y recréese la vista, que la vida es una sola, hombre. 

Otra “bestia negra” de los defensores de las manifestaciones escafandradas es precisamente la existencia de “carrozas” publicitando negocios lgtb. Que si es capitalismo, que si mercantilización de una lucha…Tal vez, pero repare usted, decentísima dama o caballero en que esos negocios ya mercantilizaban cuando esta lucha empezó y no era rentable, a veces mas bien lo contrario, y fueron básicos para una visibilización que no existía ni en las novelas de Corín Tellado ni en las tertulias literarias o políticas de andar por casa o de andar por radios y televisiones ni en los grupos de solidaridad con la causa sandinista o las misiones católicas. 

Por tanto, reivindiquemos la carroza como método de reconocimiento amén de podium. ¿Qué en los últimos años se ha “colado” mucha empresa oportunista? Seguro, pero aparte de que colaboran económicamente con el evento que no subvenciona ninguna institución, dígame donde no suceden esas cosas y dígame que no es de sabios rectificar y unirse, que es lo que estoy tratando de que usted haga, por cierto.

No olvidemos que toda esta parafernalia que aquí se defiende viene siempre precedida de un cortejo político donde se corean consignas y lemas y la abre una gran pancarta con el eslogan elegido por los colectivos que organizan el evento en la que ni hay gente desnudarse ni está patrocinada por ninguna marca y, créame que siempre tiene carácter reivindicativo. Si no estuviera tan pendiente de los desnudos lo sabría de sobra.

Y, por favor, no me critique a las trans porque eso si que no se lo voy al consentir, porque ellas fueron las primeras que se rebelaron y plantaron cara al puritanismo opresor a derecha e izquierda, y eso si que es mil veces mas importante y meritorio en una lucha, en cualquier lucha, que la indumentaria. Además sepa usted que continuaron haciéndolo SIEMPRE a pesar de ver como los avances legislativos y sociales las olvidaban una y otra vez. Un respeto. Carta blanca a las personas trans en una lucha que, pudiendo haber sido solo suya, generosamente quisieron compartir.

No le dé más vueltas, amigo de recto proceder. En NUESTRA manifestación las normas las ponemos nosotras y nosotros y fíjese que cabe todo el mundo y caben todas las actitudes, incluso la suya que echarían os de menos si faltara cono el legendario concurso televisivo “Un, dos, tres…responda otra vez” extrañó a Don Cicuta cuando ya no estuvo más.. Y no le llame cabalgata, sea un poco respetuoso. ¿O también se refiere al 1 de mayo como “la cabalgata de los trabajadores”? 

Déjeme finalizar con un consejo para personas LGTBI que no se sienten representadas por este modelo de manifestación: deje de criticar, venza la pereza y los prejuicios y manifiéstese con nosotras y nosotros. Nadie le va a representar mejor que usted mismo.

Lo de explicar por qué no se celebra el Orgullo hetero mejor lo dejamos para cuando tenga una pizarra y lápices de colores al mano. Le haré unos dibujitos explicativos maravillosos. 

Feliz Orgullo a todas y todos. A usted también.


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