Al-Hakam Morilla Rodríguez •  Opinión •  13/07/2017

‘Nuevo orden’ de EEUU: ¿sueño o pesadilla?

«Si no miras las cosas desde una amplia perspectiva será difícil que llegues a ser un experto en estrategia». Miyamoto Musashi.
 
‘Remember El Álamo!’, ¡Recordad El Álamo!, clamaban los independentistas texanos para animar al resto de los decimonónicos secesionistas de los territorios mexicanos del norte, en manos de un tirano. Allí nacería con la épica de esa batalla numantina, la leyenda de los comandantes Travis y Bowie y el mito de Davy Crockett que inflaman el patriotismo entre los ciudadanos de la mayor potencia del planeta. Nos referimos a la utilización simbólico-propagandística de la conquista de los colonos yanquis del norte de México, por causa de la debilidad de este último, una república centralista, luego trampantojo federal, y nacional-católica. Hay fenómenos aún peores lejos de allí, por otros lares se conforman con una falta de vergüenza y de dignidad cochambrosas.
 
No entendemos como los embajadores y cónsules de países musulmanes, residentes en el E. español, consienten la asociación infamante del Islam y el terrorismo. Porque si es Islam -término que procede de Paz- no puede ser terrorista. Y si es terrorismo no puede justificarse, en modo alguno, en el Islam. El que esos Estados de mayoría musulmana ni rechisten, después de estos agravios divulgados en los medios de comunicación españoles -tramoya que el supernumerario exministro del Interior Fernández Díaz conoce tan bien… ¿verdad, Zoido?-, resulta un despropósito. ¿Cómo desde las capitales de Marruecos, Argelia, Egipto, Turquía, Arabia Saudita, Kuwait, Emiratos, Irán, Pakistán, Indonesia y otras, sus gobiernos no han llamado a consultas a sus representantes diplomáticos en Madrid y otros lugares del E. español, antes de la ruptura de relaciones diplomáticas sin más dilaciones? Si es que conocen todavía algunos en su cobarde desidia el significado de la palabra Sharaf (‘honor’).
 
Periódicamente aparecen grandes titulares con la ‘detención preventiva’ -como en las sombrías épocas de la Ley de Sospechosos- de unos presuntos partidarios de las cucarachas mercenarias del ISIS, o anuncian el arresto de supuestos perpetradores de alguna atrocidad (que sólo beneficia al parafascismo belicista)… para dejarlos libres por falta de pruebas a los pocos días o semanas. La diferencia es que lo que antes apareció en portada ahora se refleja con letra pequeña escondido en páginas interiores. Pero calumnia que algo queda. El daño ya está hecho. 
 
Más racismo, islamofobia, antisemitismo y xenofobia. A muchos no parece importarles la satanización del que nos presentan como fabricado adversario ideológico: ‘el sarraceno’, ‘la morisma infiel y traicionera’… Santiago y cierra España. ¿Imaginan desde otro ángulo que porque ETA naciese en un seminario del clero nacionalista vasco, los del IRA irlandeses fuesen bautizados católicos, o a causa de que por los veinte o treinta mil niños-soldado del Ejército de Resistencia del Señor en Ruanda y Sudán del Sur, del ‘reverendo metralleta’ Joseph Kony, hubiese ‘periodistas’ o políticos sectarios tan desaprensivos y ruines que hablasen de ‘terrorismo cristiano’? ¿Hay que pagar con la misma moneda a la indecencia?
 
Cualquiera puede regocijarse al querer llamarse a engaño por campañas difamatorias masivas en televisión, radio y prensa. Cruzaditas de baja estofa a las que se pretende dar fuste intelectual con el concurso de autodenominados ‘expertos’. Como aquel Gustavo de Arístegui, ¿recuerdan? El por entonces diplomático -oficial de la orden de Isabel ‘la católica’, cruz al mérito policial con distintivo blanco y cruz de plata al mérito de la guardia civil- que nos sermoneaba antes a todas horas con conspiraciones de ‘Al-Qaeda’ hasta en la sopa y debajo de las piedras. Quién podría ser tan ‘mal español’ para osar reprocharle algo a este redentor patrio pepero, de ‘sangre azul’ carlistona-franquista, imputado por comisiones ilegales para que empresarios del E. español por Latinoamérica y África consiguiesen contratos, lucrativa ocupación incompatible con la función de embajador o alto cargo. 
 
Y dejando atrás las caducadas monsergas de Arístegui, continuadas por sus epígonos baratos actuales, con un ‘nivel 4’ de alerta antiterrorista, movimientos turísticos multitudinarios a orillas del Mediterráneo, y disgregado el califato de vodevil del Medio Oriente con el consiguiente peligro de centrifugadas células de descerebrados incontrolables… ¿dónde están los bolardos por las concurridas zonas comerciales de pueblos y ciudades costeros y de los paseos marítimos, las disuasorias exhibiciones uniformadas con armamento de guerra y demás ‘medidas de seguridad’ de rigor? Zoido, capitán Trueno sucesor de Roberto Alcázar Fernández Díaz, ¿sigues por ahí, campeón, justificando tu suculento sueldazo más dietas a la caza de pobres diablos o crédulos papanatas, o ya te has ido de vacaciones…?
 
Aquello de termina el linde y sigue… el listo, forma parte del acervo rojigualdo penitencial. Se anuncian a bombo y platillo ‘especialistas’ pagados con nuestros impuestos, que intentan en vano demonizar la gloriosa Herencia de Al-Andalus con la excusa, enfatizada con vaguedades, de que unos desharrapados con turbante invocan nuestro Legado en remotos desiertos o donde Cristo perdió las babuchas. Pierden el tiempo con insidias y maledicencias, excepto para convencer a convencidos ‘hooligans’ de la bandera del pollo, de la esvástica y de la cuadrada blanquiamarilla de Francisco I de Castel Gandolfo, retrógrada trinidad de pendones. 
 
El genocidio y expolio de los andalusíes, es decir de la inmensa mayoría de los ascendientes de los ciudadanos del E. español, Portugal, sur de Francia y la Latinoamérica ‘blanqueada’ -basta con ver el ámbito de aplicación universalizado del Terror inquisitorial desde el S.XII hasta el tardofranquismo hoy-, en el imaginario colectivo árabe representa una ‘derrota merecida’, con valor arquetípico de contraejemplo… ya que según sostienen estreñidos alfaquíes y Fatimonas analfabetas, con o sin hiyab, gustaban en exceso  a nuestros antepasados moriscos ‘el vino y las mujeres’, de ahí que nuestra Civilización única en el mundo decayese, aseguran en su garrula simpleza. Así que del sainete de pega de la ‘reconquista’ -banderín de enganche inventado por los ‘colorados’ surgido a principios de la nonagésima centuria-, por parte de agarenos con chilaba, nada de nada… nadie podría comprar semejante impostura.  El tinglado de la rancia farsa se desmorona.
 
No necesitamos por tanto amonestar a nadie porque quiera comportarse como ‘garduña’ de sacristía incitando al odio, al cretino servicio los autoproclamados ‘patriotas’ españolistas de otro Estado, como el romano, que ni pertenece a la UE. Ni siquiera nos quejamos de que la Contrainteligencia del E. español esté a una altura similar a la de Zimbawe. A esa basura vendida o incompetente de siempre ya estamos acostumbrados. La cuestión relevante es que mientras hacen al juego a la eternizada ‘guerra contra el terror’ de Bush iniciada en 2001, leitmotiv fantástico para que las empresas de armamento coticen sin descanso al alza y el petróleo ande a precio de saldo; mientras los estúpidos estrategas de la OTAN, viciados por prejuicios racistas y religiosos, se han esforzado en una guerra interreligiosa abrahámica, en Oriente Medio y extendiéndose al sur y este mediterráneos -caos sangriento en Libia, intento de golpe de Estado en Turquía, apoyo a una dictadura asesina en Egipto, dinamitación de Siria con el sostén de un carnicero tirano monstruoso, e Iraq convertido en estado fallido, genocidio consentido del Pueblo palestino…-, con las consecuencias catastróficas de millones de migrantes, exiliados y refugiados obligados a huir lejos de sus hogares destruidos.
 
Y gracias a las anteojeras de ciertas ineptas ‘autoridades’ neocolonialistas, obcecadas en dar por saco al ‘moro’, inveterada tradición, beneficiada por tamaña estulticia la pujante economía de los Dragones del Este nos va dejando rezagados. Los atlas modernos sitúan ahora el centro del mundo donde está su mayor peso demográfico y crecimiento, en el pragmático e industrioso Extremo Oriente: China, Japón, Corea del Sur, Taiwán, Singapur, Filipinas, Malasia, Tailandia, Vietnam, Indonesia, Malasia, India…
 
Nos habíamos habituado ya a que apareciese ‘el moro’ de malo de la película como antes los indios en las películas de vaqueros, o los comunistas durante la Guerra Fría. Por lo menos Hollywood visibilizaba a una gran parte de la humanidad antes solapada, aunque fuese de modo tendencioso y estereotipado. Y ahora los plutócratas dan un golpe de timón. La zona más caliente del planeta se halla en el mar de China meridional, por la anexión de islas y atolones cruciales como bases para el expansionismo comercial, dotados de recursos bajo la superficie marina. Enclaves disputados por Pekín, Taiwán, Filipinas, Vietnam, Brunei o Malasia. Además Corea del Norte, amparada por China, sigue empeñada en una escalada nuclear. Muy pronto los perversos de la factoría cinematográfica yanqui no serán postergados sicarios del Daesh al servicio de Washington y Tel-Aviv, les sustituirá una clonación de una panoplia de Fumanchús con malévolos ojitos rasgados y aviesa sonrisa en el cine… amenazarán en los nuevos guiones con destruir la ‘civilización occidental’ -como si pudiese haber otra en un mundo unidimensional-, al tiempo que se eclipsan los árabes envilecidos en el patético teatro de los media.
 
Los efectos colaterales de la devastación en el patio trasero de Europa, el sur del Mediterráneo, han hecho fracasar para disgusto de no pocos gerifaltes multimillonarios el nostálgico anhelo medieval frustrado: una Europa uniformizada por la cruz oficiando masacres, al tiempo que se invoca el dulcísimo nombre de María (seguro que les suena el esperpento). La recreación de las batallitas de Saladino y Ricardo Corazón de León podrían resultar muy entretenidas… siempre y cuando China no fuera acreedora de la mayor parte de la deuda externa de los EEUU. O en mucha menor escala Alemania tenga cogidos por los cataplines, por morosos, a los tragasantos españolazos fumigacatalanistas que nos malgobiernan, cuando no nos saquean.
 
Se entiende en este contexto geoestratégico que Europa tenga interés en desestabilizar el área del Caribe y Sudamérica, en especial Venezuela por sus enormes reservas energéticas. Explosionada la coalición del ALBA (Alianza Bolivariana de las Américas), instigando el estallido social, amamantando la corrupción desde Argentina y Brasil hasta México, no habrá muro alguno que pueda contener el éxodo del hambre y la violencia. Igual que al habernos endosado el CETA los intereses comerciales de USA se cuelan en Europa por la puerta falsa de Canadá, liquidando la seguridad jurídica internacional de los empresarios de nuestro Subcontinente, y retrotrayendo los derechos laborales hasta el S. XIX; en justa correspondencia millones de obreros latinoamericanos desesperados migrarán a la ‘tierra de promisión’ gringa, sin que haya fuerza humana que pueda detener esas gigantescas diásporas de la miseria, lo que ha provocado a lo largo de la historia revoluciones cíclicas en imperios de todo el mundo. Las sectas vaticanas desde sus nuevas capitales de New York y Washington, su codiciosa acumulación económica en tal magnitud sin precedentes, van a dejar unos EEUU comparables a la oligarquía autocrática rusa, no los va a reconocer ni la madre que los parió… Jefferson traicionado se revuelve en su tumba.
 
Adiós al viejo El Álamo enfrentado al general dictador López de Santa Anna (llamado ‘su alteza serenísima’), el cual obligaba a los inmigrantes en México a bautizarse católicos y les prohibía los juicios con un jurado popular. No vale en la actualidad mucho más aquella epopeya de resistencia al despotismo que una escuela de novicios sodomizados. Hasta siempre, heroicos comandantes Travis y Bowie, en vuestro imperecedero recuerdo miccionan cardenales enseñoreándose desde los Apalaches a las Montañas Rocosas. ¿Adónde fuiste intrépido Davy Crockett de nuestra infancia de hermosos sueños locos, para que unos putrefactos curánganos avarientos utilicen tu sagrada memoria, de amante de la libertad, como felpudo…?
 
 
* Al-Hakam Morilla Rodríguez, Coordinador de Liberación Andaluza. Cuenta de twitter bloqueada por la censura: @lascultura . Nueva: @liberacionan

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