Geraldina Colotti •  Opinión •  14/05/2018

El viento de mayo sobre América Latina

El viento de mayo sobre América Latina

El viento del 68 sopla de nuevo sobre América Latina? A cincuenta años de la explosión de Mayo Francés que ha embestido sea a Europa que Latinoamérica, algunos países se preparan a recordarlo organizando la resistencia popular: desde México a Colombia, desde Argentina a Brasil, a Venezuela. En el horizonte inmediato, hay algunas importantes citas electorales que corren el riesgo de resolverse con los fraudes en estos países en los que el neoliberalismo todavía no ha sido derrotado: en Colombia, en México y en Brasil. Ya ha sucedido así en Honduras, con el avalúo de la llamada “comunidad internacional”, toda concentrada a impedir el desarrollo de las elecciones en Venezuela.

En Colombia de Manuel Santos, que ha recibido el Nobel por haber firmado el acuerdo de paz con las FARC, la solución política del conflicto armado está naufragando nuevamente en la sangre: la sangre de los exguerrilleros, diezmados por los paramilitares o perseguidos por una “justicia” sometida a los Estados Unidos, que pretende eliminar los curules en el parlamento negociados por las FARC en los acuerdos de la Habana. El exguerrillero Jesús Santrich, uno de los mediadores y futuro parlamentario, está acusado de narcotráfico por los Estados Unidos y en espera de extradición en las cárceles colombianas, donde ha retomado una huelga de hambre que lo está llevando a la muerte.

En vísperas de las elecciones del 27 de mayo, continúan a pagar con la vida también los campesinos y los líderes sociales, mientras crece la expectativa por un cambio de signo progresista representado por el candidato de las izquierdas, Gustavo Petro, que ya ha sufrido intimidaciones y atentados. En Colombia, el Mayo francés ha inspirado y preparado el movimiento estudiantil de 1971. Habrá una nueva ola en este mes contra el sistema de poder que hasta ahora bloquea todo cambio en Colombia?

Habrá un retorno del Mayo en las calles de Argentina?
En el México de hace cincuenta años, los estudiantes que protestaban en solidaridad con aquellos franceses han pagado con una terrible represión que terminó en la masacre de Tlatelolco aquella formidable ola de protesta, que duró diversos meses y que dió orígen a dos guerrillas.

En el México de hoy, que irá a las urnas el 1ro. de Julio, las organizaciones populares se preparan a contrarrestar la prospectiva de nuevos fraudes contra la posible victoria del candidato de la izquierda Lopez Obrador. El pueblo organizado logrará esta vez a voltear la página?

Y una fuerte movilización popular, que esta creciendo en Brasil parece la única arma para impedir que se cancele la candidatura de Lula a las elecciones del 7 de octubre y que el país precipite en un abismo todavía peor de aquel actual.

Pero la primera trinchera es aquella de las presidenciales en Venezuela. El principal adversario de Nicolás Maduro, que se recandidatiza para un nuevo mandato con el PSUV y sus aliados, es el exchavista Henry Falcón.

Al candidato de la derecha lo apoyan los economistas de la escuela de Chicago, que plantean el regreso del Fondo Monetario Internacional a la economía venezolana. A golpes de privatización y regreso del dólar como moneda nacional – prometen -, desaparecerá como por encanto la inflación por las nubes que ellos mismos han inducido, pervirtiendo el sistema económico venezolano.

En el campo opuesto – el campo del socialismo bolivariano – hay otro modelo de país que, para consolidarse, no podrá evitar afrontar algunos nudos estructurales que definirán su forma futura: mantener una economía híbrida, devorada desde el interior del gran capital, o ir más allá, asumiéndose el peso de nuevos ataques, pero también la esperanza concreta de gobernar verdaderamente el timón de la inmensa y propia riqueza?

“El capitalismo es un zombi que se rehusa a morir”, ha dicho Maduro prometiendo un cambio verdadero en caso de vencer de nuevo las elecciones. Mientras tanto, las fuerzas reaccionarias estan mostrando, también en estos días, toda su arrogancia. Los latifundistas han asesinado a otros campesinos, que pelean por profundizar el proceso bolivariano basado en las comunas.

En uno de sus comicios, Maduro ha repetido que, si regresarian las derechas, retomará la lucha armada, transformando Venezuela en el Vietman de América Latina. Por las calles del 68 y en los intentos revolucionarios que han venido después, también a Europa, resonaban las palabras del Che, pronunciadas un año antes de su carta a la Tricontinental en la que invitaba a “crear dos, tres, muchas Vietnam” contra el imperialismo. Una indicación para aplicar también hoy, hechas las debidas proporciones de fuerzas y contextos: crear dos, tres, muchos brotes de guerrilla comunicativa para apoyar al socialismo bolivariano.

Traducción Gabriela Pereira


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