Redacción •  Internacional •  04/04/2017

Grave crisis humanitaria en Haití seis meses después del huracán Matthew

El país no se recupera y 1,4 millones de personas precisan ayuda alimentaria urgente.
Alianza tiene en marcha la campaña “Haití: cambiando la vida de las personas” para recaudar fondos para ayuda de humanitaria.
La población haitiana vive con menos de 1,5 euros al día.

Grave crisis humanitaria en Haití seis meses después del huracán Matthew

Seis meses después del paso del Huracán Matthew, 1,4 millones de personas en Haití siguen precisando ayuda humanitaria urgente y de ellos 280.000 se encuentran una situación de extrema necesidad de alimento. Alianza por la Solidaridad, que trabaja en el país desde hace 12 años, constata la necesidad imperiosa de incrementar la ayuda internacional tras un desastre que causó unas 550 víctimas mortales y afectó a 2,5 millones de haitianos. 
 
En la actualidad, de los 290 millones de dólares que la ONU consideró necesarias para la reconstrucción, los gobiernos del resto del mundo apenas se han comprometido a aportar una quinta parte (58,7 millones) y lo cierto es que sólo se ha desembolsado un 15% (42,9 millones), cantidad claramente insuficiente.
 
Alianza por la Solidaridad trabaja en una de las zonas más afectadas desde el pasado mes de octubre con ayuda de emergencia y proyectos de rehabilitación para dar respuesta a la crisis alimentaria que ha generado la catástrofe. Con su proyecto ayuda a paliar la inseguridad alimentaria de 1.500 personas (300 hogares) en la comuna de Abricots (Grand Anse). Se trata de una acción que tiene como objetivo principal a las mujeres, un grupo vulnerable gravemente afectado por el desastre. Al mismo se destinan los fondos recogidos a través de su campaña Haití: Cambiando la vida de personas.
 
Hay que recordar que el paso del huracán Matthew destrozó los campos de cultivo, viviendas, escuelas, centros médicos y hasta las embarcaciones y enseres de pesca en todo el sur de la isla, principalmente en el suroeste, en Grand Anse, cuando el país que aún no se había recuperado del terremoto de 2010, seísmo en el que fallecieron 300.000 personas. En total, el 80% de los cultivos que se solían cosechar entre enero y febrero quedaron destruidos, agudizándose la crisis humanitaria hasta el extremo de que se han localizado familias enteras viviendo en cuevas que se alimentan de plantas tóxicas.
 
A comienzos de abril, todavía quedan más de 46.000 personas desplazadas viviendo en campamentos de refugiados. A ello se suma que desde comienzos de año se ha contabilizado 1.856 casos de cólera, cifra que podría subir hasta 30.000 a final de año si no se toman medidas. Sin embargo, de momento la ONU no ha conseguido los fondos necesarios para frenar una epidemia que llegó al país con los cascos azules y prendió entre una población que en un 50% no tiene acceso a agua potable y vive en condiciones de insalubridad.
 
Alianza por la Solidaridad, que lleva 12 años en el país, en los últimos seis meses ha participado en el diagnóstico de la situación en las zonas más afectadas y ha trabajado sobre el terreno para identificar las necesidades más urgentes en el Suroeste. En Grand Ansé, la zona más devastada por el huracán, se distribuyen kits de higiene y plantas potabilizadoras de agua para evitar el contagio de enfermedades en esta situación de vulnerabilidad. Asimismo, ha puesto en marcha una iniciativa comunitaria para la preparación de las tierras de cultivo de dinero por trabajo (cash for work) cuyo objetivo es inyectar recursos monetarios en la zona. También se están distribuyendo útiles agrícolas y semillas de ciclo corto adaptadas a la zona y a la cosecha de primavera para 300 familias.
 
Paralelamente, se da formación en las comunidades sobre nutrición e higiene, bueno uso del agua y prevención de epidemias. El rol de la mujer en este sentido es fundamental para la gestión de las enfermedades post-desastre, asegurando las condiciones de higiene y nutrición.
 
También en el Sudeste, dentro de un proyecto con FAO de ayuda alimentaria, Alianza por la Solidaridad ha distribuido dinero en efectivo a las familias para mejorar su situación y se han distribuido semillas y útiles agrícolas y de pesca.
 
Con todo ello se busca aumentar las capacidades de resiliencia de las familias en la zona seleccionada, apoyando una recuperación de sus medios de vida, partiendo de un enfoque de derechos.
 
Estas iniciativas han sido posibles gracias a fondos de la AECID, del Gobierno de Cantabria y donaciones particulares, que han llegado a través de la mencionada campaña Haití: Cambiando la vida de personas, que apela a la solidaridad de la sociedad española. Con un SMS con la palabra ALIANZA al número 38014 se aportan seis euros y un SMS también con la palabra ALIANZA al 28014 se aportan 1,20 euros.
 
En los próximos meses, Alianza por la Solidaridad tiene previsto ampliar sus acciones con nuevos repartos de ayuda humanitaria, gracias a nuevos fondos de la cooperación internacional y a las aportaciones que lleguen desde España coincidiendo con la época de lluvias y por tanto con la próxima siembra.


Haití /