CCOO Andalucía reclama medidas de acción positiva de empleo y formación para las mujeres: 6 de cada 10 personas incorporadas al desempleo son mujeres

CCOO ha lanzado un mensaje expreso para que, “más allá de los acuerdos alcanzados por la igualdad entre mujeres y hombres, materializados en los Reglamentos de Registro de Planes de Igualdad y Registro Salarial, que contribuirán a eliminar las discriminaciones en el ámbito laboral, se pongan en marcha medidas de acción positiva de empleo y formación para las mujeres”.

Lo hace, una vez más, ante una realidad que sitúa a las mujeres como la parte más perjudicada de la crisis laboral provocada por la pandemia. Así lo demuestran los datos que apuntan que 6 de cada 10 personas que se incorporaron al desempleo entre los meses de julio y septiembre son mujeres.

Además, la tasa de actividad de las mujeres, con un 48,9%, es 14 puntos más baja que la de los hombres, con un 62,9%, en Andalucía.

Según explica la central, la tasa de paro femenina ha aumentado en 2.5 puntos en un año, “lo que supone 33.900 mujeres desempleadas más, 10 puntos por encima de las mujeres españolas y cerca de 8 puntos por encima de la tasa de desempleo masculina en Andalucía que se sitúa en el 19,97%”. Este dato implica, en opinión de CCOO, “que las mujeres ven bloquearse nuevamente sus posibilidades de desarrollar una actividad económica que les permita llevar y/o mantener sus propios proyectos de vida”.

El sindicato indica que “a pesar de que la tasa de empleo ha crecido levemente en el último trimestre, no ha revertido la brutal pérdida de empleos femenino en el último año, con 70.400 desempleadas más. En la actualidad, 4 de cada 10 empleos están ocupados por mujeres”.

La parcialidad involuntaria es otra de las características que marcan la precariedad el trabajo de las mujeres ya que el 56% de las mujeres que trabajan parcialmente lo hacen de forma involuntaria. “En estos momentos, 1 de cada 4 mujeres trabaja parcialmente lo que, junto con la salida del mercado laboral de muchas de ellas, puede ser reflejo de que el confinamiento y la interrupción de las clases ha obligado a un gran número a quedarse al cuidado de niñas y niños o de a familiares dependientes”.

En cuanto a la temporalidad, “otra de las lacras que soportan las mujeres”, arroja datos demoledores, ya que, según el SEPE, el 94,5% de los contratos firmados por mujeres hasta septiembre de 2020 eran temporales.

“Es difícil prever cómo repercutirá esta segunda ola de la pandemia en el empleo femenino, ya de por sí muy perjudicado, pero en septiembre el 52% de las mujeres andaluzas seguían bajo el paraguas del ERTE, lo que significa 45.478 mujeres que no son contabilizadas como desempleadas, pero sí sometidas a una incertidumbre laboral y económica”.