Trump aumentón en 7,8 billones la deuda pública de Estados Unidos

Durante el mandao del presidente estadounidense Donald Trump, la deuda nacional creción en 7,8 billones de dólares, casi un 40%, respecto a la herencia dejada por la anterior administración liderada por Barack Obama, para alcanzar la cifra difícil de visualizar de 27,7 billones de dólares (billones en su acepción española de millón de millones).

Lejos quedan las promesas de Trump durante su campaña electoral en 2016, cuando prometió que en 8 años de mandato «se desharía totalmente de la deuda». Aunque tan solo ha contado con cuatro años para solventar, su política de exhenciones fiscales a compañías multinacionales y grandes fortunas del país, muestran que los resultados eran diametralmente opuestos a los prometidos. Los planes de estímulo ante la crisis sanitaria, terminaron de apuntalar el incremento desmedido de la deuda.

Cuando Trump asumió el cargo en enero de 2017, la deuda nacional estadounidense se aproximaba a los 20 billones de dólares. La Tax Cut de 2018, una reducción de los tipos de interés generales a las corporaciones desde el 35% al 21%, junto a la reducción de dos puntos de la presión fiscal a todos los segmentos de ingresos, redujo significativamente los ingresos federales, en un momento en el que la deuda nacional superaba el 100% del Producto Interior Bruto estadounidense. Las guerras comerciales de 2019 con China y la crisis sanitaria, se encargaron del resto.

Tan solo George W. Bush supera el porcentaje de incremento de la deuda nacional durante su mandato, aunque el incremento registrado por este, enmarcada en las guerras de Irak y Afganistán,  se produjo a lo largo de 8 años frente a los cuatro que ha necesitado Trump.

A pesar de la imagen transmitida históricamente por los republicanos de tener más capacidad de gestionar e impulsar la economía del país, el endeudamiento ha incrementado históricamente más durante las administraciones republicanas. Incluso bajo esas dinámicas, los efectos de las políticas económicas de Trump han sido especialmente graves. Diversos economistas de distintas corrientes de pensamiento, advierten de las graves consecuencias que tendrá de cara al futuro de los Estados Unidos.