Esteban Melo, miembro de la Asamblea Nacional de Ecuador: «Hay altísismas sospechas de un fraude electoral este domingo»

Este domingo se celebran las elecciones presidenciales en Ecuador, unas elecciones clave en las que Ecuador se juega su futuro: volver a la senda progresista de la Revolución Ciudadana iniciada por Rafael Correa y traicionada por Lenin Moreno, o ahondar en el camino neoliberal iniciado por este último. Las encuestas ofrecen la posibilidad de la victoria del joven economista Andrés Arauz, de la Unión por la Esperanza, apoyada por Correa. Sin embargo, las maniobras realizadas por el gobierno de Moreno en las últimas semanas han despertados la preocupación ante un posible fraude electoral.

Hablamos con Esteban Melos Garzón, economista parlamentario de la Asamblea Nacional de Ecuador en representación de la circunscripción exterior de Europa, Asia y Oceanía, sobre las elecciones, el riesgo de fraude electoral, el papel de Ecuador en Latinoamérica y el mundo, y las esperanzas del pueblo ecuatoriano por recuperar su soberanía.

Tercera Información – Hablemos claro, ¿Existe riesgo de fraude electoral en las elecciones de este domingo?

Esteban Melo – Desgraciadamente existen unas altísimas sospechas al respecto. Empezando por lo más grave, por lo último: pretenden que no se realice el conteo en las juntas receptoras del voto. La propia Constitución de la República, la propia Ley [Orgánica Electoral de Ecuador, Código de la Democracia] en su artículo número 43 señala claramente que se deben contar en la Junta receptora del voto. Y de no ser así, puede ser causa de nulidad según señala el artículo 50. De repente nos encontramos con que se habilita a los señores cónsules en el exterior a que tomen las urnas, las precinten y las envíen a Quito. ¿Qué nos garantiza que a medio camino no son sustituidas, son cambiadas o son manipuladas?

A parte de eso, de forma verbal, se nos ha informado de que se va a reducir el número de observadores, lo que en España son los interventores electorales, en ciertos sitios como en Génova, para 29 juntas receptoras de voto se pretende habilitar solo a 3. En Murcia, de 61 juntas, 61 mesas, solo 3. En Barcelona, con 72, a 10. Completos absurdos que no van a permitir tener una constatación clara de que el proceso democrático es transparente.

Antes de este anuncio de la CNE de trasladar los votos a Ecuador para su recuento, el Comité de Campaña de UNES, Lista 1, ya había denunciado maniobras por parte del gobierno, entre ellas en el voto exterior. ¿Cuales han sido estas trabas a la participación?

Bueno, son varias. La primera es que en su momento, cuando ya se cumplió el tiempo máximo para determinar los recintos electorales, de los 48 recintos, apenas 33 habían sido declarados como tales. La segunda es que según estableció el Consejo Nacional Electoral (CNE) el día de ayer, se podrá unificar juntas receptoras del voto, cuando en su momento lo que habíamos señalado es que había que multiplicar las juntas receptoras del voto para que precisamente se pueda mantener el distanciamiento social, para que las propias juntas sean mucho más ágiles y mucho más rápidas… ¡Pero no! Ellos han decidido todo lo contrario.

Otro elemento es que según la Constitución, los ecuatorianos tenemos derecho a estar bien informados. Pero los consulados han hecho poco o nada por informar a la comunidad ecuatoriana residente en Europa, especialmente en España, sobre el proceso electoral que vamos a tener este domingo. Una auténtica negligencia o ineptitud, pero en cualquiera de los dos casos, algo absolutamente malo para el derecho de los ecuatorianos a elegir.

¿Puede achacarse a la ineptitud?

Lo que pasa es que el CNE fue puesto a dedo por Trujillo. Y Trujillo fue puesto a dedo por Moreno. Eso nos indica claramente como pretenden manipular el proceso electoral. Los consejeros del CNE son miembros de partidos políticos, ¡algo que está prohibido por ley! Sin embargo se la saltaron a la torera y en este momento pretenden manipular el proceso electoral dado que Andrés Arauz, la Lista 1, la de Rafael Correa, va encabezando las encuestas y todo indica que ganaríamos en primera vuelta con una mayoría aplastante en la Asamblea Nacional.

Recibíamos esta semana la noticia de que el CNE había retirado las credenciales como observadores internacionales a dos delegados españoles, entre ellos el eurodiputado Manu Pineda. ¿Está poniendo en riesgo el CNE el proceso de observación internacional?

Es absolutamente necesario que la comunidad internacional, que los observadores internacionales hagan presencia en el Ecuador. Y que reporten y condenen todas las irregularidades que pueda haber. ¿Cómo puede ser posible que a un eurodiputado, el cual ya había sido previamente cualificado por el propio CNE, simplemente porque a uno de sus consejeros, vinculado a un partido de extrema derecha, se le ocurre, le quiten la calificación como observador internacional? ¡Esto ya ni siquiera tiene que ver con la ideología! Tiene que ver con el hecho de ser demócratas.

Yo como asambleísta ecuatoriano, como patriota ecuatoriano, hago un llamamiento a todos los partidos políticos demócratas del mundo para que nos ayuden a defender la transparencia y la democracia en Ecuador, la cual está en riesgo.

La institucionalidad ha sido afectada: Manipularon a través de una consulta mañosa las distintas instituciones. Incluso llegaron a asaltar el CNE. Han intentado en cinco ocasiones que no podamos inscribirnos ni participar en las elecciones. Nos acogió Centro Democrático, la Lista 1, al partido político mayoritario en Ecuador, que tiene el respaldo electoral. Y ahora que estamos participando, nos quieren dejar fuera de cualquier forma. Hoy mismo me comunicaban que el listado de observadores, nuestros interventores y apoderados, no ha llegado. Todas las demás han llegado, excepto la nuestra.

Hablemos de la realidad actual de Ecuador. ¿Cómo llegan los ecuatorianos a estas elecciones? ¿Cuál ha sido el resultado del giro neoliberal de Lenin Moreno?

El daño ha sido dramático, auténticamente doloroso. La pandemia ha sido muy mal manejada. Pero antes de la pandemia, la economía había sido muy mal gestionada. La economía entró en recesión. El país, ahora sí, está sobre endeudado. Cuando Lenin Moreno asume la presidencia, Ecuador crece a un ritmo del 3,4%, con un nivel de endeudamiento de apenas el 27% del PIB. Antes de COVID, la economía caía ya un -0,5%%, con un endeudamiento sobre el 65%, ¡y sin obras! Sin que se haya plasmado nada en el país. Con más de 300.000 despidos durante el último año. Con una precarización del trabajo brutal. Y donde, con dolor he de decirlo, tenemos 55.000 fallecidos extra durante la pandemia, uno de los peores resultados en el mundo del manejo de la pandemia.

Hemos podido ver un gobierno indolente. Con 17 millones de habitantes se han adquirido 8000 vacunas para vacunar a 4000 personas. ¿Y quienes las han recibido? De la forma más descarada y caradura, el presidente y su círculo más cercano, mientras directamente han abandonado a la población. Yo lo puedo contar de la forma más cercana y más dramática. Durante la pandemia, se llevaron la plata de los hospitales, negociaron y vendieron los insumos médicos. ¡Yo perdí a mi padre! Me pregunto si en el hospital en que le trataron, que en realidad era una carpa, le habría tratado mejor si hubiese estado presente. Ese ha sido el impacto del gobierno infame de Lenin Moreno. Por eso están tan preocupados, porque saben que una vez pierdan su poder en las elecciones, tendrán que responder ante el sistema judicial.

Nos es inevitable preguntarle, como economista experto en Asia, cual va a ser el papel que va a jugar el pulso internacional por el comercio mundial, la nueva Ruta de la Seda y las relaciones con China. ¿Y cual es la posición de UNES al respecto?

Es innegable que la principal ruta comercial se desplaza del Atlántico al Pacífico. Hay que recordar que el país con el cual está endeudado Estados Unidos es precisamente China. El gran motor actual de la economía mundial es China. También crece el peso específico de otras potencias como Rusia en el ámbito internacional. O los países del sudeste asiático. Esto nos dice que entre todos debemos construir esa aldea global en igualdad y en dignidad. No podemos permitir que se generen polos económicos basados en subyugar a los pueblos. Para ello, en América Latina debemos llevar adelante un proceso de integración regional, a través del cual, primero los países pequeños se unificarán para irse integrando como más grandes: el proceso de UNASUR, el proceso del CARICOM, los distintos espacios deben irse unificando y permitir que, de forma digna, tanto el comercio, como la política y las relaciones internacionales se puedan llevar a cabo.

Nosotros le dimos una lección al mundo en su momento con lo que sucedió con Julian Assange. Desgraciadamente, de forma vergonzosa, el gobierno de Lenin Moreno, violentando los acuerdos de espacios internacionales en materia de defensa de los derechos humanos, simplemente lo entregaron. Violentando incluso la soberanía ecuatoriana dado que en nuestra embajada entró una fuerza armada extranjera para capturar a Julian Assange

Buscaremos mejorar las relaciones internacionales con todos los países, pero, evidentemente, por una cuestión de crecimiento y de seguridad nacional, deberemos diversificar nuestras exportaciones y nuestras importaciones con el mundo, especialmente con Asia y el Sudeste Asiático.

Hablando de relaciones internacionales y procesos de integración regional, ¿genera preocupación la actitud de la Organización de Estados Americanos ante estas elecciones?

Lo primero que debería hacer la OEA es acatar su misión y hacerle caso a sus actas fundacionales que establecen que lo que busca es defender la democracia. La OEA, Almagro, le deben muchísimo a América Latina, especialmente a Bolivia, donde llegó a avalar y patrocinar un golpe de estado. Algo que ha quedado bien patente como un absurdo cuando el pueblo boliviano ha dado una victoria contundente en las últimas elecciones. Lo que debe hacer la OEA es trabajar en igualdad y dejar de lado la influencia de ciertos países que han aprovechado su hegemonía en el continente para dictar su voluntad. Los latinoamericanos debemos llevar un proceso común, con respeto a las diferencias, pero que nos permita ante todo poder manejar las cosas de forma adecuada y objetiva.

¿Cree que si se da una victoria de Arauz en las elecciones tal como indican las encuestas, existe peligro de que el gobierno intente desconocer el resultado y mantenerse por otros medios? ¿Existe la amenza de un golpe?

Bueno, lo intentarán. Pero para eso existen los cauces democráticos institucionales y, ante todo, el deseo de un pueblo de que esto cambie. Entiendo que, en su momento, en octubre, las distintas organizaciones sociales ya dieron un golpe sobre la mesa. Hubo cismas importantes en el interior de las FFAA. Ellos mantuvieron lo que les manda la Constitución. Pero, evidentemente, el pueblo ecuatoriano debe movilizarse de forma pacífica y democrática para no permitir que se siga manipulando las elecciones y la institucionalidad ecuatoriana.

Uno de los elementos fundamentales que se manejan en estas elecciones es que se acabe ese régimen de terror indolente e inepto de Lenin Moreno de forma pacífica. Nosotros somos muy claros: somos demócratas. Pero no vamos a permitir en ningún momento, y llevaremos adelante todas las acciones legales pertinentes en el momento en el cual veamos y certifiquemos que pretenden manipular las elecciones.