Unións Agrarias, Ventonoso y ASEFOGA alertan de que la actual avalancha de parques eólicos en proyecto está creando alarma social en el rural gallego

Aunque desde la entidades se salienta «la inevitabilidad del desarrollo de las energías renovables» como apuesta de la Unión Europea que pretende alcanzar unos objetivos de descarbonización en la generación de energía de un 30% para el año 2030 alcanzando el 100% para 2050, considera que «es importante conseguir que los nuevos parques no se ubiquen en las zonas agrarias«, eliminando asimismo «los impactos críticos en aquellos que finalmente se aprueben», de manera especial «en las zonas agroganaderas y habitadas».

Los colectivos llaman además la atención sobre la necesidad de que los proyectos tengan de manera obligatoria «compensaciones para los afectados», no sólo a los propietarios a los que se les ubica la instalación, sino también «para todos aquellos a los que se les recalifica urbanísticamente el perímetro y no se les compensa», una situación que es «especialmente sangrante» en el caso de parques eólicos «que se pretenden instalar sobre zonas agrarias productivas en las que existen granjas en activo» que pueden verse «seriamente afectadas por las recalificaciones urbanísticas asociadas a los parques» y que en función de la legislación actual ven desprotegidos sus derechos.

Los objetivos pasarían de este modo porque las autorizaciones de los parques que finalmente se desarrollen «se excluyan de zonas agrarias y en todo caso se sometan a la presentación por las empresas de un suficiente número de acuerdos firmados con los propietarios afectados tras negociar precios y condiciones», así como por conseguir «que se hagan las reformas legales oportunas para que las adjudicaciones de potencia tengan en cuenta compensaciones para las zonas donde se ubiquen los parques y no se repita así la situación de los años 60 y 70 en Galicia, cuando la expansión de los embalses no dejó más compensaciones que expropiaciones por precios irrisorios«.