Cae la reforma sanitaria de Duque. El Paro Nacional gana fuerza
En la mira el Ministro de Defensa, que enfrenta moción de censura el 25 de mayo, por violaciones de los derechos humanos de la fuerza pública bajo su mando.
El Senado de Colombia votó este 19 de mayo el proyecto de reforma a la Salud, promovido por el partido de derecha Cambio Radical, y apoyado por el Gobierno de Iván Duque. La retirada de esta reforma privatizadora del sistema de salud era una de las reivindicaciones del Paro Nacional, por lo que algunos partidos que inicialmente la habían apoyado, han acabado votando en contra en el Senado, para evitar el castigo de los votantes en las elecciones del próximo año. La iniciativa, que había sido presentada por el partido de derechas Cambio Radical, fue archivada por amplia mayoría en las comisiones del Senado y la Cámara de Representantes encargadas de su estudio.
EN LA MIRA, EL MINISTRO DE DEFENSA
La Cámara de Representantes aprobó la realización de un debate de moción de censura contra el Ministro de Defensa, Diego Molano, para que responda por las denuncias sobre abuso policial que se han presentado durante las manifestaciones, en el marco del Paro Nacional. El debate fue citado para el próximo 25 de mayo.
La moción de censura está contemplada en la Constitución y puede aplicarse sobre ministros, superintendentes y directores de departamentos administrativos tanto por el Senado como por la Cámara de Representantes.
Los representantes tienen un plazo de diez días para votar si Molano permanece o no en el cargo, después de haber escuchado sus argumentos.
EN LA CALLE, EL PARO SE MANTIENE
La noticia ha sido recibida como un triunfo por los cientos de miles de colombianos y colombianas que, una joranada más, han salido masivamente a marchar por todo el país, desafiando la brutalidad policial y el tratamiento de guerra que el Gobierno le está dando a la protesta social.
Bogotá, Medellín, Cali, Popayán, Ibagué, Pereira, Cúcuta, Barranquilla, Villavicencio, Barrancabermeja, El Zulia… La protesta es generalizada en toda Colombia, y abarca la más amplia pluralidad de sectores sociales: comunidades negras, indígenas, campesinos, maestros, estudiantes, feministas, mineros, vendedores informales, amas de casa, hinchas de fútbol y, en primera línea, la juventud excluida, que reclama su propia interlocución en la negociación con el Gobierno. Las reivindicaciones del Paro Nacional han sido asumidas por amplias capas de la ciudadanía colombiana, que ha tomado las calles a pesar de la orden del presidente Iván Duque de militarizar el país y acabar con los bloqueos de carreteras.
Hasta el momento en que escribimos estas líneas , media tarde en Colombia, la jornada transcurre en un ambiente festivo, con multitud de expresiones culturales. En Cali y Boyacá, el ESMAD (escuadrón antidisturbios) no ha hecho presencia en las calles por intermediación de las autoridades locales.
LAS CIFRAS DE LA REPRESIÓN CRIMINAL, ACTUALIZADAS
Las organizaciones de derechos humanos Temblores e Indepaz actualizaron este martes 18 de mayo las cifras de las víctimas de la represión en el marco de las protestas del Paro Nacional. Las cifras son provisionales, a la espera de confirmar 8 denuncias de homicidio a manos de la fuerza pública cuyos detalles se están verificando, y ante el riesgo de nuevos ataques contra manifestantes por parte de la policía, ESMAD y ejército, que son especialmente violentos durante la noche, cuando además se da la circunstancia de que rige el toque de queda por la pandemia de covid-19. Los uniformados no dudan en lanzar gases lacrimógenos en zonas residenciales y en sacar a jóvenes de sus casas, sin que se sepa a dónde se los llevan. Algunos han aparecido muertos después de su detención, y otros son incluso detenidos en el hospital.
El comunicado de Temblores ONG e Indepaz afirma lo siguiente:
«Entre las 6:00am del 28 de abril y las 12:00am del 17 de mayo de 2021, a nivel nacional ocurrieron, al menos, 2.387 casos de violencia por parte de la Fuerza Pública (sin contar casos de desapariciones), dentro de los cuales se han identificado:
–43 homicidios
–33 víctimas de agresiones oculares
–18 víctimas de violencia sexual presuntamente cometidos por miembros de la Fuerza Pública
-146 casos de disparos de armas de fuego
-384 víctimas de violencia física
-1139 detenciones arbitrarias en contra de manifestantes
-5 víctimas de violencia basada en género
Además, se ha evidenciado el uso de gases lacrimógenos en zonas residenciales donde habitan adultos mayores y niños, o el uso irregular desde el suelo y por fuera de los vehículos del ESMAD del lanzador de proyectiles Venom.»
Las cifras de desaparecidos no están claras. De las más de 500 denuncias recogidas por defensores de derechos humanos, la fiscalía afirma haber localizado a 277 personas, y continua en la búsqueda de 168. Las demás denuncias han sido desestimadas por la Fiscalía. Mientras tanto, continúan las detenciones arbitrarias y en muchos casos la labor de los defensores de derechos humanos es entorpecida por los agentes, que no informan del paradero de las personas detenidas.
OTRA NOCHE DE REPRESIÓN: ESMAD ARREMETE CONTRA LAS «MAMÁS DE LA PRIMERA LÍNEA» EN BOGOTÁ
Caída la noche del miércoles, volvieron las imágenes de represión y terror a las calles de Colombia, que circulan por redes sociales y dan cuenta de la brutalidad criminal del Estado que los medios oficiosos colombianos y extranjeros rara vez transmiten.
Una de las que dan medida de la violencia gratuita con la que actúa la fuerza pública en Colombia contra civiles que ejercen su derecho a la protesta es el ataque al grupo de mujeres que se han dado en llamar «Mamás de la Primera Línea». Estas mujeres cabezas de familia vienen realizando acciones simbólicas y acompañan a los jóvenes en la protesta y la resistencia en la calle, interponiéndose entre la policía y los jóvenes para protegerlos.
Este es el ataque que sufrieron anoche en el Portal Las Américas de Bogotá:
Los ataques de la policía contra manifestantes han sido especialmente violentos en la ciudad de Medellín, donde se reportaron más de 90 heridos, y en Usme, en Bogotá, donde el ESMAD dejaba a jóvenes encerrados en determinadas calles para retenerlos ilegalmente y llevárselos a lugares desconocidos. También en Usme se registraron disparos.
Fuente: https://www.mundoobrero.es/pl.php?id=11102