López denuncia que «la privatización de AENA empeora las condiciones de los trabajadores»

La eurodiputada de Izquierda Unida Paloma López ha denunciado este jueves que las liberalizaciones que está imponiendo la Comisión Europea en el sector de la aviación están produciendo un grave deterioro en las condiciones laborales a favor de los beneficios de las empresas. Como ejemplo, ha puesto el de AENA, cuya privatización “repercute negativamente en los trabajadores y afecta negativamente a los servicios para pasajeros”.

“La privatización de AENA está provocando que la gestión de las infraestructuras aéreas se haga pensando en la obtención de beneficios, a costa de la calidad de los servicios y de las condiciones laborales de los trabajadores”, ha advertido en Estrasburgo durante un debate sobre la estrategia para la aviación civil en la Unión Europea.

En febrero de 2015, el Gobierno de Mariano Rajoy vendió el 49% de las acciones de AENA justo después de que la empresa saliera a bolsa. Ahora, el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, se propone vender otro 10% de los títulos, ampliando la privatización pese a la oposición frontal de los sindicatos.

López ha explicado que el deterioro de las condiciones laborales de los trabajadores se refleja en una precarización generalizada en todo el sector europeo de la aviación. “Mientras los servicios aéreos han aumentado un 47% en las últimas décadas, el empleo no crece y los contratos temporales y precarios, incluidos los de hora-cero, se han convertido en una norma habitual”, ha indicado.

Este tipo de contratos, muy extendidos en Reino Unido, suponen que las empresas obligan a los trabajadores a estar a disposición de la empresa cada vez que los necesiten y a trabajar para ellas en exclusiva. Sin embargo, el trabajador no tiene asegurado un mínimo de horas mensuales.

Ante la desprotección exponencial que está afectando a los trabajadores del sector, López ha reclamado el refuerzo de la negociación colectiva a nivel europeo y reforzar el diálogo con los sindicatos sobre la regulación europea, “para eliminar las zonas grises que permiten que los cambios en las concesiones de los aeropuertos o las bases de operación de las compañías se utilicen para rebajar las condiciones laborales”.

Esta situación está provocando situaciones claras de dumping social, ante las que López ha exigido “una respuesta contundente”.