Cuba denuncia que la Embajada de EEUU realiza una «labor subversiva y agresiva» en la isla
- «El enemigo no cesa en su empeño de destruirnos», declaró el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel.
El canciller de Cuba, Bruno Rodríguez, ha denunciado este domingo a través de su cuenta de Twitter que la Embajada de Estados Unidos «está desempeñando un papel creciente en los esfuerzos de subversión política» en la isla.
«Es un comportamiento provocador y violatorio de la Convención de Viena. Tenemos la determinación de enfrentar la labor subversiva y agresiva de la Embajada», agregó Rodríguez.
Sus palabras llegan poco después de que concluyera en La Habana el II Pleno del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, en el que el presidente del país, Miguel Díaz-Canel, también acusó a EE.UU. de intentar violar la soberanía de la isla.
«El enemigo no cesa en su empeño de destruirnos. No nos perdona la osadía de que nuevas generaciones continúen la voluntad y el compromiso de mantener la independencia, la soberanía y la construcción del socialismo», declaró el mandatario.
Díaz-Canel rechazó también los pronunciamientos ofensivos de la Administración norteamericana, presidida por Joe Biden, por constituir “entrometimientos abiertos en los asuntos internos cubanos”. En paralelo, resaltó la misión de la legación cubana ante Washington, argumentando que no ha habido nunca actividad ilegal alguna dirigida a socavar las bases políticas legales o constitucionales de Estados Unidos.
No obstante, dejó claro que su país tomará las acciones pertinentes para neutralizar las medidas desestabilizadoras del imperio norteamericano y señaló la determinación de enfrentar cualquier labor subversiva y agresiva. “Cuba es diana de una guerra no convencional instigada y financiada desde Estados Unidos”, denunció.
Por su parte, el canciller, Bruno Rodríguez, arremetió contra el comportamiento del embajador estadounidense ante la isla y lo definió como «provocador y violatorio» de los acuerdos internacionales.
Mediante un mensaje emitido en Twitter, el presidente cubano repudió las amenazas de Estados Unidos de planear nuevas medidas restrictivas contra la isla, en el caso de que procese a los organizadores de una marcha, con propósitos violentos y desestabilizadores, prevista para 15 de noviembre.
El Gobierno cubano ha denunciado llamados desde el exterior para provocar el caos y la desobediencia civil, y aprovechar la difícil situación en la isla, a raíz de la pandemia de la COVID-19, y el recrudecimiento del bloqueo. En concreto, acusa a Estados Unidos de planificar las marchas a través de los medios y la prensa, auspiciados desde Miami.