Cuba exige a EE.UU. cerrar centro de detención en Guantánamo
Recientemente, un grupo de relatores de la ONU demandó el cierre inmediato de la prisión.
El presidente Miguel Díaz-Canel denunció este martes las sistemáticas arbitrariedades y abusos que se cometen en la basa naval de Estados Unidos, repudiada por el mundo, que se encuentra en territorio ilegalmente ocupado en Guantánamo, provincia ubicada al oriente de Cuba y también pidió su cierre.
“Ya son 20 años de escandalosos abusos en territorio cubano ilegalmente ocupado en la bahía de Guantánamo por parte de los mayores violadores de los derechos humanos en el mundo”, escribió el jefe de Estado cubano en su cuenta en la red social Twitter.
Este martes se cumplen dos décadas desde que arribaran los primeros prisioneros a la cárcel que el Gobierno de EE.UU. mantiene en esa base militar, a pesar de los reclamos de las autoridades locales para la devolución del territorio.
Esta denuncia viene tras la publicación de varios expertos de derechos humanos de Naciones Unidas donde condenaron los abusos cometidos en esta prisión.
Los relatores independientes de la Organización de Naciones Unidas (ONU)destacaron que en esa cárcel se cometen violaciones implacables y continuas de las garantías fundamentales de los apresados, lo que constituye una mancha para Washington en materias como el estado de derecho.
Rechazaron las detenciones arbitrarias sin juicio y las torturas o malos tratos cometidos en ese centro. “Estas son prácticas inaceptables para cualquier Gobierno, pero particularmente para el estadounidense que se dice protector de los derechos humanos”, subrayaron.
Además, criticaron la impunidad de la que gozan los que realizan estos actos y aseveraron que la Base Naval es un símbolo de la falta sistemática de la rendición de cuentas y prohibición de la tortura patrocinada por el Estado.
Los relatores exigieron el cierre del centro y el regreso de los detenidos a sus hogares o a terceros países seguros y pidieron la reparación a los torturados y detenidos arbitrariamente por sus agentes y a los responsables de las torturas a rendir cuentas.
Por su parte, el ministro de Exteriores, Bruno Rodríguez, ha señalado en su perfil que son ya «20 años de ignominia» y ha recordado que 780 presos han pasado en algún momento por la base norteamericana, «detenidas arbitrariamente, sin juicio o debido proceso».
Asimismo, ha denunciado «torturas y tratos degradantes» contra estos reclusos.