Redacción •  Vídeos •  03/02/2022

Yolanda Díaz: «nos alejamos de la precariedad y la temporalidad para construir relaciones laborales en igualdad y con más derechos»

Intervención de la vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social en la convalidación Real Decreto-ley 32/2021, de 28 de diciembre, de medidas urgentes para la reforma laboral, la garantía de la estabilidad en el empleo y la transformación del mercado de trabajo tras 9 meses de trabajo y cesiones por todas las partes. Una norma que sale adelante con un texto de 51 páginas que rebaja expectativas pero logra destacados avances.

Se ha aprobado in extremis y de manera ajustada en el Congreso de los diputados por 175 síes frente a 174 noes. Los dos diputados de UPN, Sergio Sayas y Carlos García, que esta mañana habían expresado su malestar por la decisión adoptada por la dirección de su partido de respaldar la reforma laboral, han decidido romper la disciplina de voto y rechazar la medida. La reforma ha salido adelante gracias a un error de un diputado del PP al votar telemáticamente, y -por supuesto- gracias a los votos de PSOE (120), Unidas Podemos (34, ya que el escaño de Alberto Rodríguez sigue sin cubrirse), Cs (9), PDeCAT (4), Más País (2), Compromís (1), PRC (1), Teruel Existe (1), Nueva Canarias (1) y Coalición Canaria (1).

«Me han enseñado en mi casa que cualquier avance en los trabajadores y trabajadoras merece un voto afirmativo»

Díaz ha lamentado que ERC, Bildu y PNV no hayan votado a favor, y ha argumentado que «frente a ultraactividad, prioridad de convenios o lucha contra la precariedad yo he oído: proyectos personales, humo, maquillaje, esto no cambia nada… Me entristece, se lo confieso, que la norma más importante de la legislatura se sustancie en debates superficiales, que no ayudan a superar el descrédito de la política. Me apena que el debate se sitúe en el campo de las rivalidades partidistas […] «No han querido recuperar una indemnización justa frente a despidos injustos. ¿Podían hacerlo? Sí, pero ni el Gobierno ni el Ministerio de Trabajo han querido. Primero porque lo prometieron, segundo porque se lo proponíamos, y tercero porque tenía los números de izquierdas para hacerlo».

La ministra de Trabajo también ha destacado, entre otras cuestiones, que «la norma deja atrás la reforma laboral del PP y su nefasto modelo de precariedad», y supone «la recuperación de la ultraactividad indefinida es la prueba de que la política es el camino para mejorar la vida de la gente […] Solo este precepto justifica votar a favor». Esto significa que los convenios se prorrogarán hasta que haya uno nuevo cuando la negociación entre sindicatos y empresarios se encalle. Con la reforma del PP, la vigencia se limitaba a un año y, en caso de falta de acuerdo, el convenio se suspendía. Además, se  recupera la prevalencia del convenio sectorial en materia salarial, evitando que las empresas apliquen sueldos por debajo de lo que marca el acuerdo marco del sector. 

También se potenciarán los contratos fijos discontinuos como la herramienta para los trabajos estacionales o de temporada, en detrimento de contratos más precarios. La principal novedad que se introduce es que se reconocerá la antigüedad de todo el periodo y no sólo del efectivamente trabajado. Desaparece el contrato por obra y servicio anterior que había alimentado la temporalidad alcanzando hasta 4 años de duración con la anterior reforma del PP y que afectaba a ocho millones de personas. «Y créanme, esos ocho millones de personas se merecen tener un trabajo decente». Este contrato se reduce a un máximo de seis meses con causa justificada o 90 días en contratos que atiendan a relación ocasional, no acumulables. «Esta norma dice sin presunciones ni perífrasis, alto y claro, las personas contratadas incumpliendo lo establecido en este artículo adquirirán la condición de fijas» ha señalado Yolanda Díaz.

Los contratos de formación observarán dos modalidades: la formación en alternancia y prácticas profesionales. En el primero, se combina trabajo y formación y se podrán concertar con personas de hasta 30 años durante dos años como máximo. La retribución no podrá ser inferior al 60% de lo que marca el convenio el primer año y el 75% en el segundo y nunca por debajo del salario mínimo interprofesional.

Se incorpora la protección de los ERTE por limitación o impedimento de manera ordinaria, no como se habían utilizado hasta la fecha, por causa de la pandemia. Así, las empresas que opten a ERTE por causa económica podrá tener un 20% de exoneraciones de cuotas, condicionadas a acciones formativas, mientras que los de fuerza mayor, se podrán ahorrar un 90% de las cotizaciones.

El mecanismo RED de flexibilidad y estabilización del empleo permitirá a las empresas suspender el trabajo y no despedir a los trabajadores como máximo un año, cuando se produzca una crisis económica.

Las empresas tendrán hasta el 31 de marzo para adaptar los modelos de contratación. Entre enero y marzo, se podrán hacer contratos temporales como los de obra y servicio pero con una duración máxima de seis meses.