Naciones Unidas denuncia las prácticas de Israel con la población palestina como apartheid
Para el relator especial de la ONU en los territorios ocupados, Michael Lynk, el apartheid no es un fenómeno confinado a libros de historia del sur de África.
El relator especial de la Organización de las Naciones Unidas sobre la situación de los derechos humanos en territorio palestino, Michael Lynk, denunció el viernes a la comunidad internacional que Israel practica el apartheid en el territorio ocupado de Palestina.
De acuerdo con el relator, deben aceptar y adoptar los hallazgos de su informe actual sobre descubrimientos recientes por organizaciones de derechos humanos palestinas, israelíes e internacionales de las acciones que cometen en las regiones ocupadas.
“Hoy existe en el territorio palestino ocupado por Israel desde 1967 un sistema legal y político dual profundamente discriminatorio que privilegia a los 700.000 colonos judíos israelíes que viven en los 300 asentamientos israelíes ilegales en Jerusalén Este y Cisjordania”, afirmó Lynk.
Precisó que otros 2.000.000 de palestinos viven en Gaza, considerada una “prisión al aire libre”, pues no tienen acceso adecuado a energía, agua o salud, con una economía colapsada y sin poder realizar viajes libremente al resto del país o al mundo.
Según Lynk, al dar de manera intencional y clara prioridad a los derechos políticos, jurídicos y sociales fundamentales de un grupo sobre otro en la misma zona geográfica y basada en la identidad racial, nacional y étnica, se describe jurídicamente como apartheid a nivel internacional.
“Lamentablemente, el apartheid no es un fenómeno confinado a los libros de historia del sur de África”, subrayó el relator en su informe al Consejo de Derechos Humanos.
“El Estatuto de Roma de 1998 de la Corte Penal Internacional entró en vigor tras el colapso de la antigua Sudáfrica. Es un instrumento legal con visión de futuro que prohíbe el apartheid como un crimen contra la humanidad hoy y en el futuro, dondequiera que exista”, agregó.
El funcionario de la ONU denunció que el Gobierno militar de Israel en el territorio palestino ocupado se ha construido deliberadamente con el objetivo de soportar hechos sobre el terreno, fundamentalmente a través de asentamientos y barricadas, para diseñar demográficamente un reclamo soberano israelí permanente e ilegal sobre la zona ocupada, mientras confina a los palestinos en reservas más pequeñas y confinadas de tierra desconectada.
Asimismo, recordó la existencia de otros informes y opiniones recientes emitidas por organizaciones palestinas, israelíes e internacionales de derechos humanos que coinciden con la conclusión del apartheid por parte de Israel en Palestina.
“El Consejo y la Asamblea han criticado repetidamente a Israel por desafiar sus resoluciones. Han amenazado con consecuencias. Pero nunca ha habido rendición de cuentas. Si la comunidad internacional realmente hubiera actuado de acuerdo con sus resoluciones hace 40 o 30 años, hoy no estaríamos hablando de apartheid”, enunció.
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