Bielorrusia traslada equipos militares cerca de la frontera ucraniana
Bielorrusia traslada convoyes dotados de equipos militares cerca de la frontera sur con Ucrania, mientras es probable que se una a la guerra.
El proyecto bielorruso Hajun, un grupo de supervisión de actividad militar, ha afirmado este lunes que el grupo de fuerzas regionales incluye tropas rusas y serbias, confirmando que parte del equipamiento ha sido trasladado durante los ejercicios militares registrados en la ciudad de Brest, en el suroeste del país.
“Al menos 24 unidades se están moviendo hacia la frontera con Ucrania. También se ha desplegado equipo militar, como tanques, baterías de mortero, vehículos pesados y otro equipamiento de ingeniería”, ha informado el grupo en su canal de Telegram.
Bielorrusia también anunció el pasado 7 de diciembre el traslado de equipamiento militar, en un intento de contrarrestar la “amenaza terrorista” por parte de “guerrillas” que operan desde el otro lado de la frontera.
Ya con anterioridad, el presidente de Bielorrusia, Alexandr Lukashenko, anunció en octubre que había acordado con su homólogo ruso, Vladímir Putin, el despliegue de un grupo regional conjunto de tropas por “el agravamiento en las fronteras occidentales de la Unión Estatal”.
El Ministerio bielorruso de Defensa explicó más tarde que el grupo se está desplegando “para garantizar la paridad en el campo de la seguridad militar y el mantenimiento de la paz en Bielorrusia”. No obstante, Ucrania considera esto como una amenaza y acusa a Bielorrusia de ser cómplice de la operación militar que lanza Rusia en el territorio ucraniano.
Minsk es el aliado más cercano de Moscú en la zona. Lukashenko ha afirmado que la implicación de Bielorrusia en la operación militar especial rusa es por el momento “limitada”, únicamente para “impedir que el conflicto se extienda a territorio bielorruso” o para prevenir un posible ataque desde Polonia, Lituania y Letonia.
Con todo esto, no ha descartado la posibilidad de lanzar una operación militar en Ucrania si siguen las persecuciones contra los residentes bielorrusos. “Participamos en ella. No lo escondemos. Pero no hemos matado a nadie, no hemos enviado militares a ninguna parte”, sostuvo el presidente bielorruso a principios de octubre.
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