Orlis Pineda presenta su nuevo disco «Añoranza cubana» en Madrid
- El disco cuenta con nueve canciones, y en él han colaborado cantantes de la Isla (Waldo Mendoza, Roly Berrio, Eduardo Sosa, Marta Campos y Yaroldi Savó), así como el rapero Peke Wambo, vocalista del grupo Vallekana Sound System.
Orlis Pineda, a quien le gusta presentarse como «kañautor cubano-vallekano» -oriundo de Baracoa, en la provincia cubana de Guantánamo, reside en el barrio madrileño de Vallecas- realizará la presentación en Madrid de su nuevo disco «Añoranza cubana». Será el próximo día 4 de enero, a las 19:30 horas, en el Teatro del Barrio, en el barrio de Lavapiés.
Oriundo de Baracoa (Cuba), primera villa cubana, fundada en América por Diego Velázquez, Orlis Poneda lleva en su interior la música cubana enriquecida con una amalgama de géneros como la rumba flamenca, la samba, el pop, el hip hop, el reggae… Sus canciones están abrigadas de poesía, filosofía, historias…
Desde 1997 radica en Madrid, ofreciendo conciertos en diferentes espacios de la capital, como Sala Riviera, Casa de América, Palacio de Congresos, Sala Joy Eslava, Sala Arena, Sala Galileo Galilei, Clamores Jazz, Café Libertad, Fiestas de San Isidro, Fiestas del PCE, etc. Fuera de Madrid, ha actuado en todas las comunidades del Estado español, así como en Berlín, París, Lisboa, Santiago de Chile, etc., etc.
Ha compartido escenario con Luis E. Aute, Antonio Vega, Eliades Ochoa, Polo Montañés, Los Chichos, Orishas, Ismael Serrano, Luis Pastor, Tontxu Piña, Carmen París, Amistades Peligrosas, Raúl Torres, Amaury Pérez, Buena Fé, Waldo Mendoza, Los Chicos del maíz, Habana abierta, entre otros…
Como cortesía de Orlis Pineda a Cubainformación les dejamos un adelanto: dos temas, «Madre mía» y «Añoranza cubana», el primero está dedicada a su madre y el segundo «al paraíso que lo vio nacer», Cuba.
«Ponle corazón» es una de las canciones más emblemáticas de Orlis Pineda y es un himno de cubanía frente al bloqueo y los ataques de guerra cultural desde Miami. Por este videoclip ha recibido ofensas y amenazas pero, como señala el autor de Baracoa, «mi corazón late, pero nunca tiembla».