Alto Comisionado de DD.HH. constata difícil situación en Haití
Türk se reunirá también con la Defensoría del Pueblo, representantes de las fuerzas de seguridad, víctimas de violaciones de los derechos humanos y organizaciones civiles.
El Alto Comisionado para los Derechos Humanos de la ONU, Volker Türk, valora la situación en Haití durante una visita al país caribeño que lo llevó también a reunirse con el primer ministro de esa nación, Ariel Henry, informaron el miércoles medios locales.
Las conversaciones se celebraron poco después de la llegada del alto funcionario y trataron sobre «las iniciativas del Gobierno en materia de derechos humanos, como el diálogo nacional, la creación de un ambiente propicio para la organización de elecciones, el reforzamiento del sistema judicial y la reducción de la prisión preventiva».
Por su parte, el primer ministro Henry aseguró que «Haití ha tomado buena nota de las recomendaciones en el marco de la Evaluación de Política Universal y va a comenzar, lo más rápidamente posible, a ponerlas en marcha» para rendir un informe en unos dos años.
El mandatario haitiano añadió que «fue también la ocasión de poner el acento en las numerosas implicaciones de la crisis multidimensional en el país, sobre todo respecto al derecho a la vida, a la salud, al respeto de la vida privada, a la libre circulación de personas y bienes y a la propiedad».
Antes de concluir su visita el próximo viernes, Türk se reunirá también con la Defensoría del Pueblo, representantes de las fuerzas de seguridad y del Poder Judicial, víctimas de violaciones de los derechos humanos y organizaciones civiles, según afirmaron fuentes cercanas a su oficina.
El diplomático austríaco recorrerá además la zona fronteriza de Ouanaminthe y ofrecerá una rueda de prensa para evaluar su viaje antes de abandonar la nación caribeña.
Ante la grave situación en Haití, en noviembre pasado Türk pidió detener las deportaciones, especialmente hacia la vecina República Dominicana.
Tras el asesinato en 2021 del entonces presidente Jovenel Moise, Haití se halla sumido en una aguda crisis sistémica, intensificada tras el magnicidio y por el accionar de las bandas criminales que han sumido al país en una espiral de violencia.
Las pandillas se han hecho fuertes, al punto de controlar buena parte de Puerto Príncipe, la capital, en un entorno matizado por la reaparición del virus del cólera, que ya se ha cobrado cientos de vidas.
El Gobierno haitiano solicitó oficialmente en octubre pasado el envío de una fuerza extranjera, tras lo cual el secretario general de la ONU, António Guterres, propuso establecer una «fuerza de acción rápida» con militares de uno o varios países y no bajo bandera de Naciones Unidas, iniciativa que aún no se ha concretado.
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