Crisis en la gestión de homologaciones: faltan funcionarios para enfrentar el atasco de 50.000 expedientes
- Manifestaciones continúan en seis ciudades.
En una reciente reunión con representantes del grupo Manifestación por una Homologación Justa, el Ministerio de Universidades dio a conocer cifras alarmantes relacionadas con el proceso de homologación de títulos extranjeros. Hasta la fecha, se han acumulado 50.000 expedientes sin revisar y 30.000 expedientes «incompletos». El ministerio niega decir el número de funcionarios encargados de gestionar este proceso, pero admite que son «muchos menos» de los necesarios. En el 2022, eran solo 8 funcionarios.
Con el objetivo de denunciar las negligencias y retrasos escandalosos en el proceso de homologación de títulos, el grupo realizó manifestaciones en octubre, y convoca nuevamente manifestaciones del 14 al 16 de noviembre en seis ciudades: Madrid, Barcelona, Valencia, Málaga, Bilbao y A Coruña.
El proceso de homologación de títulos extranjeros está tardando años, en los casos más graves ha tardado hasta 8 años para profesionales como los odontólogos, durante los cuales existe silencio administrativo por parte del Ministerio. No obstante, de acuerdo con dos Reales Decretos, el Ministerio debe resolver las solicitudes de homologación en el plazo de seis meses.
El Ministerio no se responsabiliza del atasco, achacando a la falta de funcionarios. Contando únicamente los expedientes pendientes a principios de 2023 y los expedientes recibidos hasta agosto de 2023, los solicitantes han aportado más de 16 millones de euros en tasas para este procedimiento, fondos que se pueden utilizar para contratar los funcionarios necesarios para acabar con el atasco, afirma el grupo.
La paralización de la gestión de expedientes coloca a los profesionales en situaciones de extrema vulnerabilidad social e inseguridad económica, como el caso de un obstetra-ginecólogo venezolano del grupo con dos años en espera, que actualmente se desempeña como ayudante de cocina. Señala que las habilidades que han adquirido con mucho esfuerzo y sacrificio las pierden durante años esperando poder ejercer en España. Varios estudios realizados por el Centro de Estudios sobre Migraciones, Discriminación y Racismo Institucional indican una alta prevalencia de ansiedad y depresión entre estos profesionales debido al tiempo de procesamiento excesivamente largo y el silencio administrativo.
El Ministerio también atribuye los retrasos al 50% de las solicitudes que se consideran «incompletas». Sin embargo, el grupo niega rotundamente esta acusación. Según un representante del grupo, muchos de los expedientes están supuestamente «incompletos» debido a la incompetencia del sistema de gestión. El Ministerio ha solicitado reiteradamente los mismos documentos, no ha facilitado todos los requisitos en su página web y ha insistido en enviar mensajes a los 40.000 solicitantes del antiguo decreto por correo postal. “Falta voluntad”, dice un pediatra graduado en Estados Unidos y que espera tres años y medio. «Estamos luchando contra la xenofobia y la discriminación».