Unai Sordo: “El precio de la vivienda en España es uno de los grandes problemas sociales, pero también económicos”
El secretario general de CCOO, Unai Sordo, asistió en Málaga a la inauguración de la Jornada “El derecho a la vivienda digna, adecuada y sostenible”, y en una comparecencia ante los medios de comunicación destacó la dificultad de acceso en España a una vivienda con costes razonables para buena parte de trabajadores y trabajadoras.
“Un lugar en el que vivir, en el que dormir y en el que abrigarse debiera ser un derecho fundamental constitucionalmente reconocido, y sin embargo la vivienda en España se ha utilizado durante demasiados años como un bien de especulación, como un activo revalorizable o incluso como una herencia”, señaló.
Para Sordo “es el momento de ser valientes en la aplicación de la ley de vivienda” y considera primordial que haya “una política destinada a garantizar el acceso de la mayoría social a viviendas a precios asequibles, impulsando fundamentalmente el acceso a la vivienda de alquiler”.
En opinión del secretario general de CCOO, el tema es complejo pero “hay que hacer al menos dos o tres cosas”. Entre ellas, destaca, en primer lugar “desplegar un parque público de viviendas mucho más ambicioso del que hemos tenido hasta ahora”. España necesita más viviendas de protección oficial, básicamente en régimen de alquiler.
En segundo lugar, hay que buscar más iniciativas públicas para poder movilizar las viviendas vacías que existen, “utilizando los Fondos de Recuperación europeos para rehabilitar viviendas y áreas urbanas enteras con criterios de eficacia y de eficiencia energética para que las viviendas estén mejor aisladas”. Muchas de estas viviendas, además, podrían incorporarse a los parques públicos de vivienda en alquiler, con condiciones asequibles para las personas que entran a vivir y con condiciones de seguridad para los propietarios.
Unai Sordo resaltó, asimismo, que “aunque desde CCOO somos conscientes de que es más que probable que un número muy importante de comunidades autónomas boicoteen la ley de vivienda estatal que se aprobó en la parte final de la última legislatura”, es necesario que las comunidades autónomas, pero también los Ayuntamientos, puedan determinar las zonas tensionadas. Y que en aquellas zonas donde el precio de alquiler o venta de vivienda es tan disparatado sobre la renta media de las personas que viven allí que necesariamente tengan que ser precios intervenidos, “que no se puedan revalorizar de cualquier manera ni los niveles de los alquileres ni de venta en aquellos espacios, urbanos o rurales, donde ya los precios estén por encima del 30 o el 35% de la renta disponible de las familias que allí viven”.
Sordo insistió en que “es un problema social, pero el disparatado precio de acceso a una vivienda en España es también un problema económico” ya que si de media el 40% de los ingresos familiares se dedica a pagar una hipoteca o un alquiler, se está detrayendo renta disponible de las familias que no se utiliza para otras cosas y, por tanto no genera otra actividad económica ni otro tipo de empleo. “Desde este punto de vista el exceso del precio de la vivienda es también un problema económico”.
Por otro lado, Sordo subrayó que “las exageradas rentabilidades que han tenido las inmobiliarias y los promotores inmobiliarios, así como el sistema financiero, con el precio de la vivienda hasta el año 2008, han detraído inversión de otros sectores productivos”, y España necesita canalizar inversión privada a sectores productivos con más futuro en un momento de transición digital y energética que requiere fondos públicos pero también requiere fondos privados. Por lo tanto, “también por cuestiones de eficacia económica, en nuestra opinión hay que reducir los precios de la vivienda y las rentabilidades disparatadas, muchas veces basadas en la mera especulación.”