Por Andalucía Andalucía exige al Gobierno andaluz el cambio de nombre de los centros educativos que mantienen nombres del franquismo

Dicha propuesta exige a la junta “incoar de oficio el procedimiento de los elementos contrarios a la legislación relativa a la memoria democrática de los centros andaluces”, además de “publicar el listado completo con todos los centros educativos andaluces que tengan una denominación contraria” a dicha ley. Por último, la propuesta pide “desarrollar y publicar una calendarización en la que se establezcan cada uno de los hitos más destacados hasta alcanzar el objetivo de renombrar cada uno de los centros educativos” con dicha denominación.

Según ha explicado la portavoz de Por Andalucía en la comisión de Desarrollo Educativo, Alejandra Durán, “la memoria democrática es un deber ético y moral que deben proteger todas las administraciones públicas por muchos motivos, pero lo fundamental es por reparar y evitar la repetición de los episodios más oscuros de nuestra historia”.

Según Durán, en Andalucía “falta mucha voluntad política para cumplir dichos objetivos” y ha recordado que, tal y como ha denunciado el sindicato USTEA “en Andalucía, al menos, unos 40 centros educativos conservan nombres relacionados con la dictadura franquista y el golpe militar”.

Es el caso, por ejemplo, en Granada, del CEIP Gallego Burín, que lleva el nombre del periodista y político Antonio Gallego Burín, que fue alcalde franquista de la ciudad desde 1938 hasta 1951. O también el del CEIP Federico Mayo, en Jerez. Federico Mayo fue capitán de ingenieros en el cuartel general de Franco durante la contienda civil y el primer director del Instituto Nacional de la Vivienda desde su creación en 1939. En Sevilla, en otros centros, destaca el CEIP. Joaquín Benjumea Burín, que fue alcalde de Sevilla y ministro de Franco. En Jaén, el SEP Felipe Arche, recuerda a este militante falangista, organizador del golpe militar en Santander y posteriormente, procurador en las Cortes franquistas y gobernador civil en Jaén.