Una de las mejores playas de la Costa da Morte podría perder su bandera azul por la organización del macrofestival V de Valarés
La Asociación Autonómica y Ambiental Petón do Lobo apuesta por la defensa del espacio natural de la playa de Balarés en Ponteceso (A Coruña) y considera que "abarrotar de gente una playa", en contra de lo que afirman sus promotores, "no es garantía de sostenibilidad ambiental", tal como pretende venderse desde el entorno de la Fundación Eduardo Pondal, organizadora del evento.
Para el colectivo ecologista «no basta con tener un festival de música indie y querer parecerse a California» para organizar un evento de semejantes características, recordando que el pasado año «se extendió más allá de las fechas permitidas por la Xunta de Galicia».
Desde Petón do Lobo indican que «incluso fuera de la temporada de baños», además de los correspondientes permisos de la Demarcación de Costas, autoridades autonómicas y locales, es precisa la comunicación con suficiente antelación a la Asociación de Educación Ambiental y del Consumidor (ADEAC) de la celebración de eventos «que puedan afectar a las condiciones sanitarias ambientales de la playa, retirando la Bandera Azul durante la celebración de los mismos y no izándola de nuevo hasta demostrar fehacientemente que se restituyeron las condiciones originales que justificaron su concesión».
EN SU EDICIÓN DE 2016 EL FESTIVAL SE ENFRENTÓ A GRAVES SANCIONES POR EL INCUMPLIMIENTO DE LOS CONDICIONANTES IMPUESTOS
El pasado año, y tal como reconoció públicamente el alcalde de Ponteceso, Lois García Carballido, el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (SEPRONA) detectó irregularidades que estuvieron a punto de costarle a los organizadores del festival una contundente sanción por el posible impacto del evento, que se celebra en un espacio protegido a nivel europeo.
Petón do Lobo, que ya había advertido de las irregularidades detectadas sobre el incumplimiento del horario autorizado durante el fin de semana a la Fundación Eduardo Pondal, reclamó entonces a la Consellería de Medio Ambiente a apertura de una investigación y el inicio del correspondiente procedimiento sancionador con el objetivo de garantizar la protección de la playa de Balarés y su entorno, situados dentro del área de máxima protección de la Red Natura 2000 en Galicia.