Por Andalucía exige a la Junta inspecciones para confirmar si las vivienda turísticas cumplen los requisitos legales
- La Asociación Sevilla Se Muere traslada al grupo parlamentario los “efectos perversos” que el turismo tiene sobre la vida y salud de las vecinas y vecinos.
La portavoz adjunta de Por Andalucía, Esperanza Gómez, urge al Gobierno de Moreno Bonilla a actuar con medidas “reales y serias”, sobre los efectos negativos que el turismo descontrolado produce en nuestras ciudades y centros históricos, sobre todo en materia de vivienda y salud, “ya que cada vez es más difícil acceder a una vivienda en los núcleos urbanos, sobre todo de las capitales y zonas costeras, y quienes pueden vivir allí, lo hacen en detrimento de su descanso y bienestar mental”.
“El turismo genera beneficios pero también efectos perversos que hay que mitigar. Existe una vulneración de derechos, derecho a vivir en un entorno amigable donde se pueda desarrollar la vida, derecho al descanso y a recibir unos servicios básicos, derecho a no ceder espacio público al servicio del turista y a los veladores. Es necesaria una reversión progresiva de la residencialidad de las viviendas en las zonas más afectadas”, declara.
De hecho, la parlamentaria, tras una reunión mantenida con la Asociación Sevilla Se Muere, ha escuchado en primera persona la preocupación de las vecinas y vecinos por lo efectos nocivos de la turistificación, como la masificación de los espacios, “que hace imposible vivir en determinadas zonas de la ciudad”, además del desorbitado precio de la vivienda y el “casi monopolio de los fondos buitres sobre las viviendas vacías que convierten los centros de nuestras ciudades en grandes hoteles”.
“La Junta de Andalucía debe ejercer sus competencias y controlar las zonas tensionadas, poner en marcha un verdadero decreto de vivienda, no como el actual que es un claro caso de dejación de funciones, que garantice una inspección para que las viviendas existentes cumplen con los requisitos legales”, destaca Gómez.
En este sentido, la diputada por Sevilla ha hecho hincapié en la necesidad de elaborar un mapa real de zonas tensionadas en Andalucía y aplique la ley en esas áreas para mitigar la presión turística que provoca, por ejemplo, los cruceros que desembarcan miles de turistas a la vez en un mismo lugar.
Asimismo, la portavoz de Por Andalucía en la comisión de Turismo, Cultura y Deporte, ha manifestado que otra de las consecuencias es que las ciudades, “por pura inercia”, han ido desarrollando una actividad económica “dependiente 100% de este turismo desaforado”, como es, por ejemplo, la proliferación de veladores que no cumplen la legislación en cuanto a la disposición de las mesas, el respeto a los edificios históricos y el no ocupar espacio público no asignado, limitando la movilidad de los ciudadanos.
Por último, Esperanza Gómez ha advertido que las secuelas que la turistificación puede producir sobre salud, física y mental, de la población autóctona pueden llegar a ser muy graves ya que no se está teniendo en cuenta ni la soledad que están sufriendo los vecinos, la falta de servicios y de vida, así como el constante ruido.
“El desarraigo social de las personas que han tenido que abandonar sus barrios es un efecto devastador en aquellas familias que se ven alejadas de su entorno familiar y social y que, por tanto, pierden una red de apoyo imprescindible para el desarrollo de un entorno familiar”, concluye la portavoz adjunta de Por Andalucía.