Cómo lidiar con la frustración en el póquer en Legiano
Casi todos los que juegan al póquer se han encontrado con el concepto de frustración, el «enemigo» más peligroso e insidioso de cualquier jugador. Entonces, ¿qué significa frustración en el póquer en Legiano y cómo podemos lidiar con ella?
Es un estado psicológico de un jugador, desencadenado por varios irritantes (particularmente mala suerte), donde las emociones anulan la razón, y la persona se determina a recuperar las pérdidas a cualquier precio, arriesgando todas sus fichas.
Si te encuentras en este estado con frecuencia, puede suponer un problema y debes combatirlo. De lo contrario, esa frustración puede consumirte y llevarte al punto de perder todo lo que tienes.
Causas de la frustración
La razón más común por la que los jugadores se frustran es la mala suerte. Puedes sentarte en la mesa durante varias horas, pero que no te lleguen buenas manos, y te veas siempre detrás de tus rivales.
O, por ejemplo: puedes tener una mano fuerte en el flop — un set (trío) — y que tu oponente persiga una escalera con un proyecto (gutshot), igualando tus apuestas y venciéndote al final en el river. Esto puede suceder repetidamente, y que todas tus manos aparentemente fuertes acaben derrotadas constantemente por combinaciones más fuertes de tus oponentes, y empieces a sentir como si la suerte te hubiera abandonado completamente. Bajo tales circunstancias, es fácil sucumbir a las emociones y frustrarse.
Sin embargo, la frustración también puede surgir por factores fuera de los típicos fallos del juego. Podrías sentarte a jugar en Legiano ya en un mal estado emocional, tal vez debido a una pelea con un ser querido, una bronca de tu jefe u otros factores estresantes externos. En tal estado, puedes frustrarte después de cualquier pequeño contratiempo.
Para cada jugador, la frustración puede aparecer por diferentes factores, por lo que el primer paso es identificar las razones por las que sucumbes personalmente a la frustración.
Cómo deshacerse de la frustración en el póquer
Si sucumbes fácilmente a las influencias emocionales y te frustras a menudo, la mejor solución podría ser dejar el póquer para siempre. Por mucho que no quieras alejarte del póquer, la mejor manera es evitar jugar a este juego o a cualquier otro juego de azar. De lo contrario, las cosas podrían salirte muy mal. El póquer no es un juego para débiles, y para jugar de forma rentable en Legiano, es necesario tener nervios de acero.
Pero si todavía no quieres dejar el póquer, debes tomar todas las medidas posibles para evitar sucumbir a la frustración:
● Nunca te sientes a jugar en un mal estado emocional, bajo la influencia del alcohol, cansado después de trabajar o si tienes sueño. De lo contrario, ni siquiera podrás detectar el momento en el que la frustración «toque a tu puerta.»
● Recuerda que el póquer es un juego de azar donde la suerte juega un papel importante. Acepta que no importa lo profesional o hábil seas, las pérdidas y fracasos te sucederán al igual que a cualquier otro jugador. Las victorias se logran a largo plazo, no en 2-3 manos.
● Si ves que las cartas no vienen y no haces más que perder, lo mejor es dejar la mesa y posponer el póquer para otro día, olvidándote de las pérdidas. No importa cuánto hayas perdido, perderás aún más si no paras de jugar. Cuando tengas energías renovadas, siempre podrás recuperar esas pérdidas y salir adelante. Recuerda que en un estado de frustración (en el calor del momento), paradójicamente, la gente nunca gana, sino que lo pierde todo, hasta la última ficha. La frase «lo quiero todo y lo quiero ahora» no te llevará a nada bueno.
● Cuando sientas que empiezas a “frustrarte” y no puedas salir de la mesa, intenta pausar el juego durante unos minutos. Durante este tiempo, trata de distraerte y calmarte. Por ejemplo, bañarte, meditar, salir a dar un paseo o hacer cualquier cosa que te ayude a calmarte y aclarar tu mente para que puedas volver a jugar en un mejor estado de ánimo.
● No pases mucho tiempo jugando al póquer para no sobrecargar tu cerebro. Cuanto más tiempo juegues, más cansado estarás y mayores serán las posibilidades de frustrarte.
● Juega solo con cantidades que no te perjudiquen económicamente si pierdes. No es necesario acumular muchas ganancias para jugar con límites más altos — si tu pila está creciendo gradualmente, retira parte del dinero. No guardes todo tu dinero en el cajero de la sala de póquer. Así, si te frustras, no lo perderás todo.
● No dejes que el póquer sea tu única fuente de ingresos. Siempre debes tener un trabajo o ingresos adicionales además del póquer. Fíjate en los jugadores profesionales; la mayoría tienen ingresos adicionales más allá del póquer. Así que no creas que puedes ganarte la vida solo con el póquer.
Si ningún método te ayuda a lidiar con la frustración en Legiano, debes empezar a buscar ayuda de un especialista.