Naciones Unidas denuncia nuevos ataques de Israel contra su sede en Líbano
- La Misión de Paz de Naciones Unidas en el Líbano (Unifil) denunció hoy nuevas agresiones israelíes contra sus instalaciones en el vecino país, lo que amenaza el papel otorgado por el Consejo de Seguridad a esa fuerza.
En un comunicado divulgado aquí, la entidad advirtió por recientes explosiones contra su sede de Naqoura, afectada por segunda vez en las últimas 48 horas.
Se trata de un acontecimiento serio, agregó el texto al recordar que el jueves, dos de sus efectivos fueron heridos en esa demarcación por las Fuerzas de Defensa de Israel.
Cualquier ataque deliberado contra las fuerzas de paz es una grave violación del derecho internacional humanitario y de la resolución 1701 del Consejo de Seguridad, que aprobó el mandato de Unifil como custodio de la Línea Azul que separa al Líbano de Israel, acotó.
El jueves, la Misión rechazó otras incursiones de Israel en Naqoura y otras áreas, así cómo ataques contra la sede de la fuerza de paz en esa demarcación.
Según detalló otro comunicado, dos efectivos de mantenimiento de la paz resultaron heridos después que un tanque Merkava de las FDI disparara hacia una torre de observación, en la sede de la Unifil. Ambos permanecen en el hospital aunque sus lesiones no son graves.
De acuerdo con el titular de Operaciones de Paz de la ONU, Jean-Pierre Lacroix, los denominados cascos azules enfrentan un elevado riesgo sobre el terreno, mientras cumplen con su mandato.
«La seguridad y protección de las fuerzas están cada vez más en peligro», ya que «no se respetan las salvaguardas que el derecho internacional otorga a las instalaciones y al personal de las Naciones Unidas», dijo el alto funcionario la víspera, durante un encuentro de emergencia del Consejo de Seguridad.
Destrucción del sistema multilateral
La brutal escalada de violencia de Israel en Gaza se ha traducido en ataques genocidas, limpieza étnica y castigo colectivo contra los palestinos, asegura una treintena de expertos independientes en derechos humanos de la ONU.
En una declaración emitida a propósito del aniversario del conflicto, los firmantes pidieron a la comunidad internacional actuar frente a lo que calificaron como un genocidio para la población de Gaza y los territorios ocupados.
La actual escalada, advirtieron, amenaza con romper el sistema multilateral internacional.
Asimismo, recordaron la retórica genocida de Tel Aviv, incluida la del primer ministro, Benhamin Netanyahu, que dio paso a la entrada del ejército en la Franja de Gaza en octubre de 2023.
“Un año después, la promesa de los dirigentes israelíes de destruir Gaza se ha cumplido, dijeron los expertos y relatores al calificar el estado actual de la Franja como “un páramo de escombros y restos humanos, donde los supervivientes luchan por aferrarse a la vida entre privaciones y enfermedades”.
Las bombas israelíes no han perdonado a nadie: ni periodistas, ni estudiantes, ni académicos, ni médicos, ni enfermeras, ni bebés, ni mujeres embarazadas, ni discapacitados, ni funcionarios, ni personas en busca de alimentos y seguridad, ni trabajadores humanitarios, añadieron.
El comunicado instó a actuar frente a esos actos injustificables, en consonancia con las obligaciones morales y jurídicas de los estados para prevenir atrocidades y preservar el orden jurídico internacional, los derechos humanos y la humanidad.
“Nuestros llamamientos han sido en gran medida desoídos, junto con los de millones de personas de todo el mundo que han utilizado sus plataformas para abogar por el fin de la violencia, y que siguen enfrentándose a tácticas represivas para silenciar y castigar sus voces, en varios países”, dijeron.
De acuerdo con los expertos, el orden jurídico internacional se resquebraja ante estas atrocidades, que ignoran los llamados de la Corte Internacional de Justicia, la Asamblea General e incluso el Consejo de Seguridad de la ONU.
La incapacidad para garantizar un alto el fuego y la rendición de cuentas de los responsables o cómplices, no sólo ha permitido la continuación de una brutalidad sin precedentes, sino que la ha extendido a toda la región, remarcaron.
“La comunidad internacional debe actuar con la máxima urgencia para cambiar la trayectoria de la violencia si queremos evitar una conflagración a gran escala con consecuencias impensables, sobre todo para los niños”, pidieron.