Los grandes partidos desoyen a la ciudadanía y no impiden en el Senado el regreso del Premio Nacional de Tauromaquia
La plataforma «La Tortura no es Cultura» expresa su absoluto rechazo a la reciente decisión de la Comisión de Cultura del Senado, que, con los votos en contra del PP y la abstención del PSOE, ha rechazado una moción presentada por Izquierda Confederal.
Madrid, 26 de marzo de 2025. Esta moción instaba al Gobierno a reafirmar su compromiso con la protección y el bienestar animal y a evitar la restauración del Premio Nacional de Tauromaquia y otros reconocimientos institucionales que promuevan espectáculos basados en el sufrimiento y maltrato animal. La decisión del Ministerio de Cultura de suprimir el Premio Nacional de Tauromaquia recibió más del 90% de apoyo ciudadano durante el proceso de consulta pública y posteriormente, el Ministerio de Cultura lo suprimió en septiembre de 2024.
La tauromaquia, lejos de ser una expresión cultural, es la exaltación de la violencia más despiadada hacia los animales. Carmen Ibarlucea, presidenta de LTNEC reflexiona: “Las corridas de toros son un espectáculo inaceptable rechazado por la gran mayoría de la sociedad, porque es contrario a la ética y la protección de los animales y contraproducente desde el punto de vista de la educación, y que, sin embargo, se ofrece como espectáculo incluso a menores de edad”.
Por último, Encarna Carretero, portavoz de ANDA (Asociación Nacional para la Defensa de los Animales) señala: « Premiar y financiar con dinero público prácticas que glorifican el maltrato animal es inaceptable y un retroceso en nuestra evolución como sociedad. Los fondos del Estado no deben destinarse a sostener una tradición basada en el sufrimiento, sino a actividades que respetan los derechos de los animales y reflejan los valores éticos y humanos de la mayoría de la población».
Es indignante que, en pleno siglo XXI, el Estado siga financiando la tauromaquia, un espectáculo cuyo único propósito es infligir dolor y sufrimiento a los animales. El maltrato animal no es cultura. Premiarlo es una afrenta a la dignidad de todos los seres vivos ya la sensibilidad de una sociedad que cada vez más rechaza la violencia.
El mes pasado dimos un paso histórico con la entrega de 715.606 firmas que respaldan la Iniciativa Legislativa Popular #NoEsMiCultura. ¡215.600 firmas más de las necesarias! Esto demuestra, de manera rotunda, que, en democracia, la cultura se elige, no se impone”.
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