Colombia acude a sus primeras elecciones tras la firma de los acuerdos de Paz de La Habana

36 millones de colombianos están llamados hoy a las urnas en las elecciones legislativas que configurarán la Cámara y el Senado durante los próximos cuatro años. Unas elecciones que supondrán la introducción de la antigua guerrilla FARC-EP, reconfigurada como el partido político Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común, en la vida política y parlamentaria alejada de las armas, tras los históricos acuerdos de paz de La Habana establecidos el pasado año.

Más de 3000 candidaturas aspiran a ocupar uno de los 108 curules del Senado y 172 de la Cámara, en unas elecciones que han visto aumentar en 10 el número de legisladores ya que como parte de los acuerdos de paz, la Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común contará con cinco representantes en cada cámara independientemente de sus resultados electorales.

Las encuestas electorales despejan pocas dudas sobre cuál será el panorama legislativo que resulte de estos comicios, que sin embargo, parece claro que supondrán un duro golpe para las candidaturas del Partido de la Unidad, la fuerza política conocida popularmente como la U, creada por el ex presidente Álvaro Uribe pero que se transformó en su principal adversario político de la mano del actual presidente Juan Manuel Santos. El Centro Democrático del propio Álvaro Uribe podría establecerse como la fuerza con mayor representación si se cumplen los pronósticos que le otorgan hasta el 20% de los votos.

La izquierda colombiana, por su parte, aspira a aumentar su presencia en las cámaras legislativas, con la irrupción de la denominada Lista de la Decencia, impulsada por los aspirantes a la presidencia Gustavo Petro y Carlos Caicedo, en alianza con el Movimiento Alternativo Indígena y Social, y la Unión Patriótica. En este arco también compiten por mantener su representación parlamentaria el Polo Democrático y la fuerza de centro-izquierda Alianza Verde.

Sin embargo, los resultados están completamente abiertos con más de un 30% de la población llamada a las urnas manifestándose indecisa.

Primeras elecciones de las FARC

Las elecciones ya han quedado establecidas como un momento de trascendencia histórica por ser la primera ocasión en la cual la antigua guerrilla se integrará en la vida política alejada de la lucha armada. Difícilmente la Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común obtendrá algún representante, al margen de los cinco curules en el Senado y otros cinco en la Cámara garantizados por los acuerdos de paz de La Habana para las dos próximas legislaturas. Con un 0’6% de intención de voto, la población parece continuar viendo al antiguo movimiento guerrillero como una entidad ajena al espacio político electoral.

Llama la atención que el conflicto armado y la implementación de los acuerdos de paz no parece estar entre las principales preocupaciones de los votantes. Según las encuestas, tan solo un 3’3% de la población sitúa este tema entre sus principales preocupaciones a la hora de escoger a sus candidatos al poder legislativo.

Mientras tanto, la violencia no se ha ausentado de la campaña electoral, continuando los asesinatos de líderes sociales y con las denuncias de varios candidatos de intimidación, amenazas y violencia durante la campaña.

Termómetro electoral de cara a las presidenciales

El año 2018 no solo verá a Colombia renovar su poder legislativo, estando programadas las elecciones presidenciales para el próximo 27 de mayo. Tradicionalmente, siempre se han tomado las elecciones legislativas como una primera toma de contacto de cara a las decisivas presidenciales. Un año electoral que según todos los análisis, de un modo u otro, reconfigurará el panorama político colombiano tras doce años de dominio del Partido de la Unidad.