Presentación de la Campaña Ciudadana #10añosdeCrisisEstafa
Presentación de la campaña 10 años de crisis estafa. ¡Controlemos las finanzas!
Lunes, 28 de mayo a las 11 h.
Calle Marqués de Leganés 12, Madrid (Ecologistas en Acción).
La campaña «10 años de crisis estafa« opera bajo un marco europeo donde están previstas acciones descentralizada durante el año, y en especial en torno al 15 de septiembre, coincidiendo con el décimo aniversario de la caída de Lehman Brothers. Esta quiebra es el momento simbólico que determina el comienzo y de la crisis financiera. Diez años después de aquel fracaso sistémico las empresas financieras siguen funcionando sin control y nos pueden arrastrar a una nueva catástrofe. Mientras, la ciudadanía sigue pagando un considerable precio con la pérdida de derechos a prestaciones de desempleo decentes, a una pensión digna, a una sanidad universal o a una vivienda.
La campaña hace una recorrido sobre los últimos diez años y lo que ha supuesto en pérdidas económicas destinadas al gasto público, y los consecuentes impactos sociales y ambientales que han derivado de la crisis. Por otro lado hablaremos sobre las alternativas y resistencias que han surgido en los últimos años desde diversos sectores, así como de las necesidad de que un negocio tan peligroso como el financiero deba de estar controlado por la ciudadanía y al servicio de la sociedad. Se tienen que escuchar las voces de pensionistas, estudiantes, jóvenes precarios, profesionales del sector de la salud y educación, trabajadoras del hogar, trabajadores/as de la economía digital, del mundo de la cultura, funcionarios y funcionarias y personas desahuciadas que están pagando una crisis que no han provocado.
La rueda de prensa será moderada por Juan Diego Botto y contará con representantes de la campaña “10 años de crisis estafa”.
Controlemos las finanzas
Diez años después de la caída de Lehman Brothers, ha llegado el momento de descifrar la crisis financiera mundial desde el punto de vista de la ciudadanía y de proponer soluciones comunes para favorecer el interés general. Lehman Brothers se ha convertido en un símbolo del fracaso de un sistema financiero liberalizado y desregulado. Su caída desencadenó una crisis económica y financiera -pero también ecológica y social- de tal gravedad que millones de personas perdieron sus puestos de trabajo, sus hogares, su protección social.
Se ha puesto de manifiesto la irresponsabilidad social de las grandes empresas financieras en su imprudente asunción de riesgos, así como la pasividad y complicidad de los responsables políticos en los años anteriores a la crisis. Las multinacionales financieras no se han controlado… y la ciudadanía ha pagado un considerable precio con la pérdida de derechos a prestaciones de desempleo decentes, a una pensión digna, a una sanidad universal…
Se nos pide que creamos que se han aprendido lecciones y que quizás los cambios necesarios sean inminentes. Pero no, a pesar de las fuertes críticas a la ideología de unos mercados financieros abandonados a su suerte, expresadas por muchas personas y organizaciones desde que estalló la crisis, el neoliberalismo sigue ejerciendo su control sobre las políticas, las normas y las instituciones financieras, lo que conduce a un ataque a gran escala contra nuestras condiciones de vida.
El riesgo de un nuevo colapso sigue existiendo y es posible que nos veamos obligados a rescatar a los megabancos con miles de millones de dinero público. Millones de nuevas víctimas podrían sumarse a las que ya han sufrido la crisis y los 00millones que, incluso hoy en día, siguen sufriendo la pobreza y la deuda, un recordatorio constante de que la crisis no ha terminado.
2018, décimo aniversario de la crisis financiera, es el año en que nos sumamos con este llamamiento a la acción a la campaña europea por el control de las finanzas. Es un aniversario que nos brinda la oportunidad de abrir un nuevo espacio de debate público sobre las causas profundas de la crisis y lo que queremos hacer con el sector financiero. Debemos defender nuestro futuro e imponer una solución socialmente justa a la deuda actual. No pagaremos deudas odiosas, ni hoy ni mañana. Exigimos que los bancos y las finanzas sirvan a la sociedad. En 2018, estamos decididos a intensificar la lucha por el control democrático de las finanzas.
Tenemos que desmantelar los grandes bancos, poner fin a la especulación, establecer una fiscalidad justa y eficiente del sector financiero y realizar inversiones públicas en servicios e infraestructuras que mejoren nuestras vidas y creen puestos de trabajo. Debemos transformar el sistema financiero para que dirija el dinero hacia inversiones para la transición ecológica y social en lugar de alimentar burbujas especulativas.
Denunciamos el impacto negativo de unos mercados financieros cortoplacistas que alimentan la desigualdad social, la pobreza, el colapso de los servicios públicos y el cambio climático.
Hacemos nuestras las nuevas formas de producir y compartir recursos y riqueza. Es esencial fomentar la acción política ciudadana que fuercen la adopción de normas que pongan fin a la era de la financiarización, en la que la sociedad está dominada por la lógica depredadora de los bancos y los mercados financieros. Las finanzas son poderosas, pero si nos unimos, podemos participar en esta indispensable lucha política. Necesitamos que el mayor número posible de movimientos ciudadanos se unan a nuestra coalición y hagan del 2018 un punto de inflexión, para que la próxima década sea finalmente una década en la que controlemos las finanzas.
¡Reaccionemos! ¡Actuemos! ¡Controlemos las finanzas!