Arabia Saudí expulsa al embajador canadiense y anuncia la ruptura de relaciones económicas
Los comunicados emitidos por el gobierno canadiense condenando la oleada de represión en Arabia Saudí y exigiendo la liberación de los activistas detenidos ha causado un conflicto diplomático entre los dos países. El embajador de Canadá en Riad ha sido declarado persona non grata y tiene 24 horas para abandonar el reino.
El Ministerio de Exteriores de Arabia Saudita ha declarado persona non grata a Dennis Horaka, embajador de Canadá en Riad. Al diplomático le han dado un plazo de 24 horas para abandonar el país. Al mismo tiempo, el servicio diplomático del país árabe ha convocado a su embajador en Ottawa.
Según informa Saudi Press Agency, la monarquía ha congelado todas las nuevas transacciones comerciales y de inversión que tenía previstas con Canadá.
Las discrepancias entre ambas naciones se deben a la calificación de «activistas de la sociedad civil» a varias personas detenidas en el reino. La exigencia canadiense de ponerlas en libertad fue «sorprendente» para las autoridades sauditas, y se basa en una alegación «incorrecta por completo y contraria a la verdad», sostiene el comunicado emitido por el Ministerio al respecto.
El pasado viernes 3 de agosto el Ministerio de Asuntos exteriores canadiense emitió un comunicado manifestando su preocupación por la oleada de detenciones de activistas con incierto destino en el estado absolutista del golfo.
Canada is gravely concerned about additional arrests of civil society and women’s rights activists in #SaudiArabia, including Samar Badawi. We urge the Saudi authorities to immediately release them and all other peaceful #humanrights activists.
— Foreign Policy CAN (@CanadaFP) 3 de agosto de 2018
Esta situación «obliga a adoptar una posición firme para disuadir a cualquiera que trate de afectar la soberanía de Arabia Saudita». El servicio diplomático «expresa su rechazo rotundo y categórico sobre la posición del Gobierno de Canadá y confirma su compromiso con la no interferencia en los asuntos internos de otros Estados, inclusive Canadá».
En el comunicado también se especifica la “congelación de todas las nuevas transacciones de comercio e inversión”. Además, el servicio diplomático afirma que se reserva «el derecho a tomar medidas adicionales».
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