La Plataforma andaluza contra las Bases convoca a una concentración silenciosa contra la proliferación nuclear
La Marcha del Silencio tendrá lugar el 9 de agosto, en conmemoración con el bombardeo atómico norteamericano sobre la ciudad japonesa de Nagasaki en 1945, en la plaza del Ayuntamiento de Rota.
La Plataforma Andaluza contra las Bases ha convocado una marcha silenciosa en conmemoración de los bombardeos atómicos en Hiroshima y Nagasaki en 1945. Con la concentración, la Plataforma aspira a reflejar el peligro de la proliferación nuclear y el riesgo que aún supone la existencia de arsenales nucleares capaces de destruir todo el planeta.
La concentración tendrá lugar en la Plaza del Ayuntamiento de Rota el próximo 9 de agosto, coincidiendo con el aniversario de la detonación atómica en Nagasaki, a las 19:30. El municipio de la convocatoria es célebre albergar la polémica base naval hispano-estadounidense NAVSTA Rota, un centro estratégico de vital importancia en las últimas operaciones militares de los Estados Unidos en la región mediterránea.
Comunicado completo de la Plataforma:
MARCHA DEL SILENCIO.
ROTA, 9 DE AGOSTO, CONCENTRACIÓN A LAS 19.30
EN LA PLAZA DEL AYUNTAMIENTO.
El día 9 de agosto tendrá lugar una nueva edición de la Marcha del Silencio, que ha tenido una trayectoria intermitente, pero desde hace muchos años ha defendido unos objetivos muy claros. El primero, el recuerdo de todas las víctimas de las armas nucleares, empezando con las de Hiroshima y Nagasaki en 1945 y continuando con las innumerables víctimas del uso temerario de la energía nuclear. Solo como ejemplo citaremos a Palomares, Chernóbil o Fukushima. El segundo objetivo de la Marcha es la reiterada denuncia del peligro nuclear.
Desde los años cuarenta no han cesado las pruebas nucleares y las protestas contra las mismas (recordemos el hundimiento del barco de Greenpeace en el Pacífico por parte del gobierno francés cuando la ONG protestaba contra las pruebas nucleares en Mururoa). En la actualidad nos encontramos con un gigantesco arsenal nuclear repartido por el mundo, armas sobe todo de las dos grandes superpotencias de la Guerra Fría, pero también de países como Reino Unido, Francia, China, India, Paquistán, Corea del Norte o Israel; Bélgica, Alemania, Italia, Países Bajos y Turquía siguen guardando armas nucleares de EE. UU. como parte de la política nuclear de la OTAN.
Llevamos muchos años en la provincia de Cádiz viendo cómo navegan por nuestras aguas submarinos nucleares, doblemente peligrosos, por su propulsión nuclear y por el armamento que pueden almacenar. Gravísimos incidentes provocados por submarinos nucleares se han dado en el pasado e incluso podrían haber dado lugar a una Tercera Guerra mundial que habría sido la última de la historia. Desde los años 60, tras la crisis de los misiles de Cuba, hemos estado varias veces al borde de la catástrofe.
En la Marcha del Silencio no proferimos ningún grito. Invitamos a la reflexión colectiva y nos acompañamos de la música y la poesía. En este espacio de reflexión queremos lanzar preguntas como éstas:
¿Hasta cuándo la provincia de Cádiz será víctima de la servidumbre militar? ¿Hasta cuándo lo será Andalucía? ¿Por qué no basamos nuestra riqueza en la economía civil? ¿Hasta cuándo viviremos bajo la “espada de Damocles” de instalaciones que sirven a los Imperios militares y económicos? ¿Cuándo emprenderemos una Cooperación justa y solidaria con los países más pobres que evite el éxodo y la muerte de miles de personas? ¿Cuándo acabarán las “intervenciones humanitarias” que solo favorecen a los señores de la guerra? ¿Cuándo conseguiremos que el desempleo gaditano no justifique la servidumbre militar a ninguna potencia extranjera? Estas y otras cuestiones intentaremos responderlos el día en la Marcha del Silencio.