El PIE participó en la Universidad de Verano del PCE en Madrid para debatir de la izquierda europea y la crisis de la UE
El Partido de la Izquierda Europa participó esta semana en Madrid, en la Universidad de Verano del PCE, apoyada por el PIE, para hablar sobre la izquierda europea y la crisis de la UE. Lo hizo a través de su vicepresidenta Maite Mola, que presentó la mesa redonda, Heinz Bierbaum, de la dirección de Die Linke, y Anne Sabourin del Consejo Nacional del PCF y del Ejecutivo del PIE.
Heinz Bierbaum advirtió del riesgo de una división de la izquierda europea a raíz de las diferentes posiciones respecto al Euro. Insistió en que no se puede reducir el debate sobre Europa al debate sobre el euro, “hay que centrarnos en una política alternativa a la política neoliberal” y que esa política alternativa tiene que servir para fortalecer a la izquierda europea.
Y concretó algunos de esos ejes sobre los que levantar dicha política alternativa, como la democratización del sector financiero, la lucha contra la dominación de los mercados financieros, un cambio de política del Banco Central Europeo que asuma la responsabilidad del desarrollo de la economía y de la creación de empleo. También reivindicó una política económica industrial activa con inversiones públicas, el aumento de los salarios y del gasto social para fortalecer la demanda interna y una política fiscal que grave a los ricos con impuestos más altos.
Bierbaum habló de los reveses a los que se enfrenta hoy Europa tales como el aumento de las desigualdades, el escaso crecimiento, el auge de la extrema derecha y la incapacidad de la UE de construir una política común respecto a los refugiados, pero también habló de las “iniciativas interesantes que están surgiendo respecto a la necesidad de democratizar Europa” como el plan de Varufakis, del que se mostró escéptico, o el Plan B.
En este contexto situó el papel del PIE como actor necesario para coordinar la política alternativa de la Izquierda Europea. La lucha contra el Libre Comercio, añadió, “es un punto de referencia para fortalecer y construir una alianza de toda la izquierda europea lo más amplia posible frente al auge de la extrema derecha”.
Anne Sabourin, del PCF, continuó en ese sentido apuntando que “la lucha contra el capitalismo debe ser global y total” y que las respuestas a la crisis de los refugiados, al cambio climático, etc., no pueden darse sólo a nivel nacional sino a nivel internacional.
Sabourin habló de las tres opciones que se abren en Europa. Las dos primeras corresponderían a los intereses de la burguesía. Una sería la concentración del poder en las grandes potencias, dejando fuera a las periferias. La otra, una visión nacionalista, como se ha visto reflejada en el Brexit del Reino Unido. La tercera opción es la de la izquierda y está basada en la defensa el interés común del pueblo en lugar de enfrentar a las clases trabajadoras europeas. Sería la Europa de los derechos sociales.
La pregunta que dejó abierta la dirigente francesa es el cómo construir ese sistema alternativo europeo y qué estrategia seguir. Dentro de ese debate presentó la propuesta del PIE de construir un foro permanente con otras fuerzas para trabajar juntos sobre objetivos comunes, confiando en que el próximo congreso del Partido de la Izquierda Europea, que se celebrará en diciembre en Berlín, servirá para fortalecer no sólo el PIE sino a la izquierda europea.
El debate continuó entre los asistentes con intervenciones que coincidían en que esta UE no sirve y que el problema y el reto es resolver el cómo, la alternativa. También se propuso convertir el debate de la UE en un debate de lucha de clases y se advirtió sobre la necesidad de trabajar para evitar que la falta de alternativas de la izquierda permita un auge del fascismo.