Inédito empate entre favoritos rumbo a presidenciales en Brasil

Según el sondeo, mientras Haddad, del Partido de los Trabajadores (PT), creció tres puntos con relación al ejercicio precedente y llegó a un 25 por ciento de respaldo del electorado, el representante de la extrema derecha Bolsonaro (Partido Social Liberal, PSL) se quedó anclado en 28,2 puntos porcentuales.

Después, y a distancia, aparecen Ciro Gomes, del Partido Democrático Laborista (PDT, por sus siglas en portugués) con 9,4 por ciento; el llamado candidato del golpe, Geraldo Alckmin, del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), con 7,3 y la aspirante de la Red de Sostenibilidad (Red), Marina Silva, con 2,6.

Bolsonaro fue confirmado además como el presidenciable más rechazado entre los potenciales votantes, con el 55,7 por ciento, seguido por Alckmin (52,8), Haddad (48,3) y Gomes (37,1).

Acerca de los escenarios para un eventual segundo turno, la pesquisa del Instituto MDA, realizada por encargo de la Confederación Nacional del Transporte (CNT), reveló que de enfrentarse Haddad y Bolsonaro el primero de ellos resultaría vencedor con el apoyo de un 42,7 por ciento del electorado por 37,3 su oponente.

Bolsonaro perdería también en segunda vuelta ante Ciro Gomes (35,3 por 42,7) y derrotaría a Alckmin (37 por 33,6).

De los dos mil dos entrevistados, más del 80 por ciento dijeron tener ya definido su voto, en tanto entre los indecisos un 19,3 por ciento podría votar por Haddad; 18,7 por Gomes; 17,5 por Bolsonaro y 13,3 por Alckmin.

Las elecciones generales el mes próximo, cuya primera vuelta tendrá lugar el 7 de octubre y en la que además de presidente y vicepresidente se definirán los 27 gobernadores, 54 puestos en el Senado y 513 en la Cámara de Diputados, entre otros cargos, despiertan mucho interés en un 32 por ciento de los votantes.

Para 25,1 por ciento los comicios resultan de mediano interés; generan pocas expectativas para un 20,8 por ciento y ninguna para un 21,4.

El sostenido crecimiento de la candidatura de Haddad constituye sin dudas el hecho más notorio de la campaña presidencial, tomando en consideración que su designación oficial se produjo solo el pasado día 11.

Haddad reemplazó como representante de la coalición El pueblo feliz de nuevo – que integran el PT, el Partido Comunista de Brasil (PCdoB) y el Partido Republicano del Orden Social (PROS) – al expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, cuyo registro fue negado por el Tribunal Superior Electoral (TSE).

Lula cumple prisión política desde el pasado 7 de abril en la Superintendencia de la Policía Federal (PF) en Curitiba, la capital del Estado de Paraná, adonde fue encerrado anticipadamente sin que, como prevé la Constitución, fueran juzgados los recursos presentados durante el proceso en todas las instancias judiciales.

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