EQUO denuncia el blindaje de la tauromaquia frente a una sociedad cada vez más concienciada
La red de EQUO derechos de los animales estudiará pormenorizadamente la sentencia del Tribunal Constitucional que la pasada semana anuló varios artículos de la denominada Ley Balear de Regulación de las Corridas de Toros y Protección de los Animales.
El partido ecologista EQUO ha manifestado su sorpresa y malestar ante la sentencia dictaminada el pasado miércoles por el Tribunal Constitucional que anulaba numerosos atículos de la denominada Ley Balear 9/2017 de Regulación de las Corridas de Toros y Protección de los Animales. La ley, aprobada en agosto de 2017, establecía que quedaban prohibidos los festejos taurinos en los cuales se pudiese herir o dar muerte al animal. El Tribunal Constitucional, a petición del Partido Popular, ha revisado la normativa y ha concluido su anulación porque «impone un modelo de espectáculo taurino en sustitución de las corridas de toros que se separa radicalmente de una manifestación paradigmática de la fiesta tradicional española, impidiendo, al propio tiempo, la celebración de otro tipo de espectáculos».
«Llama la atención que el Tribunal Constitucional se dedique concretamente a estudiar el contenido de una ley de protección animal porque afecte a los toros, como si tuviesen un rango de protección constitucional», comenta un militante de la formación ecologista. «Es caricaturesco, recuerda al dicho de pan y toros», añade.
No es la primera vez, sin embargo, que el Constitucional se atribuye competencias para dictaminar la viabilidad de una normativa autonómica que afectre a la tauromaquia. En 2013 el BOE publicaba el texto que regulaba la Tauromaquia como patrimonio cultural , tras haber anulado el Tribunal Constitucional la Ley 20/2010 catalana que prohibía las corridas de toros, por considerar este que invadía competencias del Estado en materia de cultura, exactamente el mismo argumento legal empleado en la sentencia del pasado miércoles contra la normativa balear. Sin embargo, en aquella sentencia se establecía un precedente que puede entrar en franca contradicción con el dictamen de la pasada semana, ya que el TC reconocía la capacidad del Gobierno de Cataluña a la hora de regular el desarrollo de las representaciones taurinas o, en materia de protección de los animales, establecer requisitos para el especial cuidado y atención del toro bravo.
Para EQUO, la nueva sentencia del Constitucional supone otro blindaje más a la tauromaquia. Consideran que el dictamen del tribunal busca evitar una cascada de regulaciones autonómicas de espectáculos taurinos que dificulten o eviten legalmente el desarrollo de las corridas de toros.
“Tras un año sin festejos taurinos en plaza, ¿Cómo se lo va a tomar la sociedad mallorquina, que por mayoría están el contra del maltrato animal y de las corridas de toros en las islas?” ha declarado Paula Jarque, coportavoz de EQUO Animales.
La red de EQUO derechos de los animales estudiará la sentencia pormenorizadamente.