Ataque a Ministerio de Exteriores en Libia deja 3 fallecidos
La explosión causó la muerte de dos funcionarios árabes y un civil, al tiempo que 21 personas resultaron heridas.
Al menos tres personas murieron y otras 21 resultaron heridas este martes tras un atentado en la sede del Ministerio de Exteriores de Trípoli, Libia.
La Cancillería libia informó que el atentado fue perpetrado por tres terroristas del grupo autodenominado Estado Islámico (Daesh, en árabe). El siniestro se produjo luego de que un atacante suicida activara un cinturón con explosivos en la entrada del edificio.
«Un coche bomba estalló delante del edificio (…) dos de las víctimas son funcionarios, el vocero de una milicia de Trípoli y el presidente de la Administración Islámica, mientras que la tercera víctima es un civil que fue a recuperar sus documentos», informó la Cancillería.
Una segunda explosión fue registrada en el piso dos de la estructura, donde se encontraba el otro atacante con una maleta de municiones.
«Las fuerzas de seguridad acudieron al lugar y hubo combates en el interior del recinto con los atacantes. Entonces en la segunda planta se produjo una segunda explosión, provocada por un suicida», agregó la Cancillería.
En tanto, todas las personas de las zonas comerciales de Trípoli fueron evacuadas, mientras que las autoridades se encuentran desplegadas en toda la capital en el marco de un operativo de seguridad para resguardar la capital y regiones aledañas.
Reacciones ante el ataque
El presidente de Argentina, Mauricio Macri, condenó el ataque del Daesh y expresó su solidaridad con los familiares de las víctimas.
«El Gobierno argentino expresa su solidaridad con el pueblo y el Gobierno libios y transmite sus condolencias a los familiares de las víctimas (…) condenamos el accionar terrorista en todas sus formas», indicó un comunicado de la Cancillería de Buenos Aires.
Por su parte, el Gobierno de Rusia hizo lo propio, al tiempo que pido justicia para los afectados del «ataque extremista», que a su solo juicio busca desestabilizar a Libia.
«Condenamos enérgicamente este acto sangriento, confiamos en que sus organizadores sean identificados y castigados (…) no podrá obstaculizar el avance del proceso político en este país», sostuvo el Ministerio de Interior de Moscú.