CGT tenía razón: Konecta despidió a 92 personas con diversidad funcional, con la aprobación de la Agencia Tributaria
La Confederación General del Trabajo (CGT) informa en este comunicado sobre una sentencia notificada hoy, 17 de enero de 2019, por el Tribunal Superior de Justicia de Madrid, en la que se reconoce que la multinacional de Contact Center, Konecta BTO, despidió el pasado verano a 92 personas trabajadoras discapacitadas de manera ilegal.
Recordamos que esta vergonzosa privatización de los servicios públicos ha supuesto durante años precariedad para las personas que trabajan en el servicio telefónico de cita previa para asignar las citas que los/as contribuyentes tengan que concertar en las diferentes administraciones de Hacienda. Esto es responsabilidad de la Agencia Estatal de Administración Tributaria que debería atender a los ciudadanos con personal público. Sin embargo, desde hace años varias subcontratas de Contact Center como Atento, Abante y Servinform han prestado este servicio de manera precaria.
Tras ser adjudicataria Konecta del servicio por parte de la empresa el año pasado, esta decidió no contar con el personal discapacitado (92 trabajadores/as), y obligó al Grupo SIFU a entregar una carta indicado a todas las personas afectadas que serían subrogadas a partir del 1 de agosto a la empresa Konecta BTO.
Konecta BTO, número uno en precariedad, decidió rechazar esta subrogación y mandar una carta a las plantillas indicando que no reconocían el convenio colectivo de ese centro especial de empleo y que solo ofrecían lo que indica el deplorable Art. 18 del Convenio de Contact Center; es decir, pasar un proceso de selección. Y aún hay más: si estas trabajadoras conseguían superar este proceso, les amenazaba con trasladarles a Sevilla.
No tenemos palabras para calificar el comportamiento del Grupo Konecta, una empresa que está eximida de cumplir el requisito legal de la contratación de un 2% de trabajadores/as con diversidad funcional exigido por la Ley General de Discapacidad (Real Decreto Legislativo 1/2013) al haberse acogido a una medida alternativa mediante los bondadosos y desconocidos actos de la oscura Fundación Konecta.
A CGT le produjo y le produce asco todo este proceso, de la que es máxima responsable por permitirlo la Agencia Tributaria. Pero CGT, como sindicato, no se iba a quedar en silencio. El pasado mes de agosto presentó una demanda reclamando la nulidad de todos los despidos y, efectivamente, el tiempo nos ha dado la razón.
En la sentencia el TSJM indica que todos estos despidos son nulos y se le obliga a Konecta a pagar el salario que han dejado de percibir desde el 1 de agosto. (Adjuntamos la sentencia).
CGT fue el único sindicato que planteó esta demanda a pesar de que en la empresa están representados otros 5 sindicatos. No es la primera vez que pasa, y en este caso ni CCOO, ni UGT, ni USO, ni Fasga ni Solidaridad Obrera entendieron que hubiera que interponer esta demanda.
La Confederación General del Trabajo ha puesto todos sus medios a trabajar contra este burdo ataque a los trabajadores y a las trabajadoras, y esta vez hemos ganado. La lucha sigue, pero la lucha sirve.