Redacción •  Actualidad •  13/03/2019

Activistas de Greenpeace se manifiestan en Valdemingómez contra la insostenible gestión de los envases plásticos en España

  • Toneladas de plástico se entierran diariamente bajo inmensas montañas de tierra, quedándose en el medioambiente durante décadas o siglos.
  • Las marcas responsables de poner estos productos en el mercado no hacen lo suficiente para atajar el problema, ni las administraciones para regularlo.
  • Los productos plásticos, como los envases, utilizan al menos 132 sustancias problemáticas para la salud.
Activistas de Greenpeace se manifiestan en Valdemingómez contra la insostenible gestión de los envases plásticos en España

Una treintena de activistas de Greenpeace han desplegado una pancarta gigante, de 30×12 metros, en el macrovertedero de Valdemingómez de Madrid, con el lema “Maldito plástico”, para denunciar cómo las empresas y marcas que producen, distribuyen y venden envases de plástico no se están responsabilizando de la recuperación y reciclaje de los mismos. Desde primera hora, la pancarta con el logo de las marcas más contaminantes ocupa el frente de vertido del vertedero madrileño, para denunciar que esta manera de gestión de residuos es, a todas luces, chapucera y peligrosa, lejos de la idílica gestión del reciclaje que nos venden.

Taparlos para que no se vean no es la solución sino un problema para el medioambiente y la salud. Los productos plásticos, como los envases, utilizan al menos 132 sustancias problemáticas para la salud (1), algunas de ellas cancerígenas o disruptoras endocrinas. Además, contienen metales pesados, usados como colorantes, estabilizadores y catalizadores, y distintas sustancias (aminas aromáticas, bisfenol A, ftalatos, retardantes de llama, formaldehído, cloruro de vinilo, etileno, biocidas, agentes de soplado, plastificantes como el TCEP, parafinas cloradas y disolventes o hidrocarburos aromáticos policíclicos) que pueden movilizarse en las reacciones ácidas que se producen en el interior de los vertederos o cuando son incinerados, generando emisiones tóxicas al aire y contaminando ríos y acuíferos mediante los lixiviados.

En Valdemingómez y en el resto de vertederos del Estado se entierran todos los años más de 750.000 toneladas de envases plásticos. Sin embargo, esto es una parte de lo que se pierde, pues a estos envases enterrados debemos sumar otros abandonados en cunetas, campos, ríos, playas y mares, incinerados o exportados a países en vías de desarrollo. En ese sentido, Greenpeace demostraba la semana pasada la presencia de plásticos españoles en Malasia y, esta semana, Greenpeace Internacional recogía fotos y videos del impacto de los plásticos en Filipinas.

La producción masiva es insostenible y solamente reciclar no es suficiente. Greenpeace presentó la pasada semana un informe que demostraba que apenas se recuperan el 25,4% de los envases plásticos que se consumen en España, lejos de las cifras oficiales publicadas por la Administración o los sistemas integrados de gestión de residuos. Esta acción, no obstante, no pretende responsabilizar al Ayuntamiento de Madrid, sino a las marcas que producen envases de un solo uso y que permiten que sus envases plásticos sean enterrados.

Que esto suceda solo tiene un beneficiario: las empresas que producen, venden y distribuyen estos productos envasados en plástico, puesto que no se hacen cargo del coste real que supone recuperar todos los envases vendidos, cargando a la sociedad y al medio ambiente el sobrecoste y la contaminación ambiental que producen.

Cada día, millones de envases terminan enterrados, incinerados o arrojados al medio natural. La nocturnidad y alevosía de las marcas que venden y distribuyen estos productos es evidente. No se responsabilizan de sus envases que son retirados por la noche por los camiones de basura y llevados a vertederos e incineradoras como en Valdemingómez”, ha declarado Julio Barea, responsable de la campaña de residuos de Greenpeace. “En todos los casos enterrar y quemar residuos plásticos es una forma más sofisticada de contaminar el medio ambiente, pero no solucionan el problema, por eso deben cerrarse inmediatamente las incineradoras y restringir a la mínima expresión los vertederos” ha añadido.

Un modelo basado solo en el reciclaje es evidente que no funciona, ya que el sistema ha tocado techo hace tiempo. Éste se tiene que complementar con recogidas selectivas de residuos más eficientes, como la recogida puerta a puerta, el pago por generación o un sistema de devolución y retorno, que son la única vía para volver a tener envases reutilizables de forma masiva. En ningún caso Greenpeace pide dejar de separar nuestros residuos para que puedan ser reciclados, pero sí advierte que es necesaria una reducción del consumo de envases de usar y tirar y apostar masivamente por la reutilización de los mismos, si queremos comenzar a luchar contra la contaminación plástica que sufre nuestro planeta.

AQUÍ ACCESO A FOTOS Y VIDEOS

NOTAS

  1. 2014 según informe de la Agencia de Protección Ambiental de Dinamarca (Problematiske kemiske stoffer i plast. Kortlægning af kemiske stoffer i forbrugerprodukter nr. 132, 2014)

https://greenplanetdepi.files.wordpress.com/2015/06/978-87-93283-30-5.pdf


Greenpeace /  plásticos /  Valdemingómez /