4 usos que puedes darle a un préstamo personal solicitado por Internet
A lo largo de la última década los préstamos personales han proliferado hasta límites insospechados. Ello no es de extrañar teniendo en cuenta tanto la crisis económica en la que se encontraba sumida nuestro país –y sigue estándolo en innumerables regiones, aunque en menor medida–, así como las ventajas propias de estas soluciones crediticias.
La rapidez es una de las claves esenciales, resultando fruto de la inmediatez que proporciona la red de redes. Muchos prestamistas aprueban las solicitudes y proceden a efectuar la transferencia del dinero en sesenta minutos, lo cual en otros tiempos era del todo impensable.
Pero dicha velocidad tan elevada también es consecuencia de la reducción de trámites a efectuar. Olvidarse del papeleo no solo implica lidiar con menos adversidades e impedimentos en general, sino también obtener el crédito online en un tiempo récord evitando la necesidad de presentar desde nóminas hasta avales.
Por si fuera poco, son concedidos incluso a personas que incurrieron en morosidades en un pasado, así que cualquier individuo se ve capaz de pedir préstamos online. Pero, ¿exactamente qué usos son los más comunes? A continuación serán desglosados cuatro de ellos.
De esta manera en caso de que no sepas a qué destinar una parte sobrante de la cantidad solicitada por ti, podrás aprovecharla al máximo. El mismo caso se dará si pretendes sacarle partido a la promoción de bienvenida de algunas entidades que ofrecen micropréstamos a nuevos usuarios con condiciones muy buenas, por ejemplo sin intereses de devolución.
Vacaciones veraniegas
El verano está a la vuelta de la esquina. ¿Tienes un destino entre ceja y ceja que es demasiado caro para ti? Los 300-500 euros de los minicréditos en línea se convierten en ideales para lidiar con ese sobreprecio al que de otra manera no podrías hacer frente.
Los préstamos de cualquier cuantía también son buenas elecciones para aquellas ofertas que te cogen de improviso, desde aquellas last-minute hasta las que excepcionalmente lanzan algunos portales turísticos para incentivar las reservas con antelación y que cuentan con un número de plazas muy limitado.
Gracias a la rapidísima obtención de la liquidez requerida no te quedarás sin billetes y/o alojamiento, viviendo unas de tus vacaciones veraniegas más gratificantes en todos los sentidos.
Reparación del vehículo
Se trata de uno de los usos que más suelen dárseles a los créditos pedidos a través de Internet. Sea cual sea la antigüedad de tu vehículo, independientemente de si se trata de una moto, un automóvil u otro elemento similar, puede sorprenderte de forma negativa con una avería en el momento más inesperado.
Si bien es cierto que algunas de ellas pueden esperar, otras requieren una reparación de urgencia para que el problema no vaya a mayores. Un claro ejemplo reside en las anomalías del motor, las cuales precisan de un arreglo llevado a cabo cuanto antes por un especialista para evitar dificultades que posteriormente acarrearían un desembolso estratosférico.
Problema hogareño
En los hogares españoles, prácticamente a diario, se producen centenares de problemas de mayor o menor envergadura. Por suerte, aquellos propietarios con maña y conocimientos pueden acabar con ellos en un santiamén, pero ¿y los individuos que desconocen el ámbito a tratar? Una muestra es la de un reventón de tubería, así como un contratiempo localizado en el sistema eléctrico o la instalación de gas.
Todos estos problemas pueden afectar tanto a la vivienda en cuestión como al resto de vecinos si terminan expandiéndose –por ejemplo, en forma de goteras en el primer caso sacado a colación–, así que nuevamente la celeridad con la que se conceden los préstamos online se convierte en una clave para que se trate de una solución inmejorable a nivel económico.
Adoptar un animal y darle una mejor vida
Indistintamente de la ciudad en la que residas probablemente tengas una perrera o un refugio de mascotas cerca de ti, a no demasiados kilómetros. En dichas instalaciones te está esperando algún que otro animal que requiere tu ayuda, puesto que en caso contrario el futuro que le depararía no sería positivo ni mucho menos.
Sin embargo, es innegable que la adopción tiene un precio a nivel económico, no solo por el trámite en sí –el cual suele rondar en torno a los 100-170 euros en función de la entidad–, sino también por los cuidados requeridos por el animal.
Deberás alimentarlo, llevarlo al veterinario e invertir en él para darle la mejor calidad de vida posible, premiándolo adicionalmente por supuesto con tu compañía. Pero, ¿y si no tienes el dinero necesario para adoptar a esa mascota que tanto ha llamado tu atención?
Pide un préstamo personal por Internet y al día siguiente ya podrás acudir a la perrera en cuestión para llevarte al cánido a tu domicilio. Habrás realizado una acción encomiable y ganarás el mejor amigo que una persona puede llegar a tener.