El «calentón» político de Feijóo con las grandes eléctricas puede echar abajo la candidatura de la Ribeira Sacra a Patrimonio de la Humanidad

El viceportavoz del Grupo Parlamentario de En Marea y portavoz nacional de Anova coincide en sus planteamientos con la Plataforma Stop Eólicos, que acaba de anunciar la presentación de un informe a la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), exponiendo en detalle la problemática generada por las autorizaciones de la Xunta en los proyectos eólicos de Paradela y entre Triacastela y Samos en la Serra do Oribio , ambas zonas aspirantes a formar parte de la séptima Reserva de la Biosfera existente en Galicia, una decisión que también depende del organismo internacional.

La Plataforma ha criticado con dureza «el cinismo político incomparable» de Alberto Núñez Feijóo como responsable del Gobierno gallego al defender «una y otra vez a base de propaganda» que la Ribeira Sacra «es la única candidatura» a nivel estatal que optará en el año 2021 a la declaración de Patrimonio de la Humanidad. Todo esto sucede, sin embargo, mientras al mismo tiempo su Ejecutivo le permite a Enel Green Power España, filial de Endesa, «la instalación de 27 aerogeneradores de gran porte e innumerables tendidos eléctricos de media y alta tensión, atravesando el territorio y modificando sin remedio uno de los paisajes rurales más singulares de toda Galicia», insistiendo en que los proyectos eólicos no sólo afectan a la Ribeira Sacra como comarca, sinó también a lo que supone el Camino de Santiago en su zona de amortecimiento o transición.

Stop Eólicos recuerda que para la UNESCO, el concepto de Valor Universal Excepcional (VUE por sus siglas) es lo que determina «que un bien sea considerado digno del reconocimiento que supone la inscripción en la Lista de Patrimonio Mundial». Por otra parte -señalan- desde la organización, también se hacen comprobaciones en relación con la integridad y la autenticidad, la protección y la gestión del territorio.

Para la Plataforma, tal como reflejó el portavoz nacional de Anova Antón Sánchez en sus intervenciones parlamentarias, «el Gobierno gallego parece olvidar que la incapacidad de presentar argumentos convincentes que justifiquen el posible Valor Universal Excepción es uno de los principales motivos de fracaso de las propuestas de las candidaturas a Patrimonio de la Humanidad» preguntándose «cómo es posible defender el valor de la Ribeira Sacra por parte de la Xunta autorizando el deterioro significativo de sus paisajes e imponiendo aerogeneradores a unos cientos de metros de las viviendas más próximas».

En la Serra do Oribio -denuncian- «la situación es equiparable» pues junto con la Ribeira Sacra y la Serra do Courel aspira a convertirse en la séptima Reserva de la Biosfera de Galicia integrándose en el programa MAB de la UNESCO (Man and Biosphere), que busca establecer bases científicas para cimentar la mejora a largo plazo de las relaciones entre las personas y el medio ambiente.

Stop Eólicos recuerda que las reservas de la biosfera, por definición, «cumplen una función de conservación destinada a la protección de la biodiversidad, los ecosistemas y los paisajes», algo del todo incompatible con la implantación de un parque eólico en uno de los macizos montañosos «más destacados de Galicia».

Para el grupo, la Xunta de Galicia hace gala nuevamente «de un preocupante desconocimiento» al autorizar el nuevo parque eólico de la empresa Fergo Galicia Vento en el área protegida de la Red Natura 2000, dentro de la Zona de Especial Conservación (ZEC) y Zona de Especial Protección de los Valores Naturales (ZEPVN) Ancares-Courel (ES1120001), poniendo en riesgo especies en peligro de extinción como el oso pardo cantábrico (Ursus arctos arctos) o el águila real (Aquila chrysaetos), además de otras en situación de vulnerabilidad afectando gravemente al paisaje de la comarca.

Desde Stop Eólicos apuntan la necesidad de un nuevo modelo eólico en Galicia y de unos responsables políticos «para los que la protección del medio ambiente, el paisaje y el rural gallego y sus gentes sean la prioridad» sin favorecer «el mayor beneficio para los que más tienen, como las empresas del oligopolio eléctrico y sus filiales». Por que «Galicia verde y azul» promocionada por el Partido Popular «no deja de ser pura propaganda mientras Feijóo parece olvidar que la protección de la naturaleza para las futuras generaciones es cosa de hechos, no de palabras»- concluyen desde la Plataforma-.