CCOO rechaza el borrador de un nuevo currículo de ESO en Madrid porque «ataca la formación integral del alumnado»
La central sindical ha manifestado su absoluto rechazo al borrador del nuevo currículo de Enseñanza Secundaria Obligatoria (ESO) en la Comunidad de Madrid, a una semana antes de que el Ministerio de Educación presente su nuevo proyecto de ley educativa.
Este sindicato considera que este nuevo currículum implica un ataque en toda regla a la formación integral del alumnado madrileño, que va a debilitar aún más el aprendizaje de una segunda lengua y las enseñanzas artísticas como la música y el dibujo, pero también la cultura clásica, la filosofía o el ajedrez. La secretaria general de la Federación de Enseñanza de Madrid de CCOO, Isabel Galvín, considera que “este nuevo currículum es un duro golpe al derecho a una educación integral para el siglo XXI, y supondrá que gran parte del alumnado madrileño quede rezagado con respecto a otras Comunidades Autónomas y países de nuestro entorno”.
Por otra parte, esta medida se lleva a cabo a costa de suprimir horas de las materias de libre configuración autonómica, lo que supone dinamitar el modelo de optatividad en Educación Secundaria. “La optatividad tiene un gran valor porque adapta la oferta a la diversidad del alumnado, la convierte en un lugar inclusivo que garantiza una formación variada –continúa Galvín. Pero la optatividad es cara, y eso lo sabe la Administración, porque la pluralidad en la oferta educativa implica conceder más cupo de profesorado a los centros. Recortar la optatividad supone agrupar al alumnado y, por tanto, recortar en profesorado, y esto es grave. En términos de cupo, esta medida puede tener un impacto similar a los recortes perpetrados en educación en 2011”.
Asimismo, CCOO considera que esta medida supone una privatización encubierta, ya que este currículum condena a las familias a recurrir a las actividades extraescolares privadas para que sus hijos estudien lo que no les ofrecen los centros educativos. Con esta medida, la Consejería de Educación sigue abundando en un modelo social y educativo que segrega y favorece a quienes más tienen. Si se quiere ampliar el horario de la Educación física en la Comunidad de Madrid, la única opción razonable es reducir el horario de religión”, concluye Isabel Galvín.