García Rubio denuncia que el descenso de los salarios que constata el INE «supone una de las caras más sucias de la reforma laboral impuesta por el PP»

El responsable federal de Empleo y Relaciones Laborales de Izquierda Unida, José Antonio García Rubio, considera que los datos hechos públicos hoy por primera vez por el Instituto Nacional de Estadística (INE) sobre la evolución de los salarios en el mercado laboral español durante la crisis “ponen de relieve hasta qué punto el ajuste de la crisis se ha hecho sobre las espaldas de los trabajadores y las trabajadoras. La pérdida salarial ha llegado a ser en algunos años del 1,5% y del 1,6%, hasta alcanzar una media del 0,7%. Con un aumento del 10% en los precios en el mismo período, la pérdida de capacidad adquisitiva de los salarios ha sido superior al 10%”.

Para García Rubio, “se confirman así los anhelos de los economistas neoliberales en el sentido de que si no se puede devaluar la moneda el ajuste hay que hacerlo mediante la bajada de salarios. Tenemos aquí ya cumplido, pues, uno de los objetivos marcados por la reforma laboral impuesta por el PP. Supone una de sus caras más sucias y negada siempre por sus máximos responsables”.

“La preocupación que le acompaña ahora -señala- es saber si este grave asunto ha tocado fondo, porque parece que tanto el nuevo Gobierno de Mariano Rajoy, con su viejo equipo económico a la cabeza, junto a la derecha empresarial de este país quieren seguir por la misma senda en los próximos años”.

Este reconocimiento de las estadísticas oficiales “resulta más dramático aún para muchas familias, ya que hay estudios que señalan que el descenso en los salarios más bajos ha sido del 18%, frente a una subida del 3% en los más altos”, indica el dirigente federal de IU.

“Las consecuencias sobre la demanda interna de la pérdida del poder adquisitivo -subraya- han sido, además de la profunda injusticia que representa, una de las causas de la profundidad y gravedad de la crisis en nuestro país, centrada en especial sobre el empleo y las relaciones laborales”.

El responsable de Empleo y Relaciones Laborales apunta también que “la precariedad y la pobreza siguen creciendo entre los trabajadores, al tiempo que se amplía el número de aquellos que, con un empleo a tiempo completo, no llegan a fin de mes y engrosan la cada vez más abultada categoría de ‘trabajadores pobres’”.

José Antonio García Rubio considera que “todo esto obliga a que la nueva correlación de fuerzas en el Congreso logre mejorar salarios, empleos y precariedad como tarea inmediata. Es urgente elevar significativamente el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) hasta alcanzar el 60% del salario medio en la legislatura, como reclama la OCDE, además de derogar la reforma laboral. A medio plazo debe lograrse un acuerdo para un nuevo Estatuto de los Trabajadores, en la línea que han propuesto los sindicatos”.