Facebook elimina red de desinformación vinculada a Áñez
La plataforma Facebook anuncia que eliminó una red que difundía contenidos favorables al gobierno de facto de Bolivia y en apoyo a la oposición venezolana.
La red social Facebook cerró 13 cuentas falsas y dos páginas vinculadas a la autoproclamada presidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez, que generaba material a favor del gobierno de facto, además de otras actividades ilegales contra varios países, entre ellos, Venezuela y México, según informó el martes el diario estadounidense The Washington Post.
El diario señala que esta red de desinformación estaba vinculada con una empresa de relaciones públicas con sede en Washington, capital de Estados Unidos, y había gastado “millones de dólares para captar a usuarios de América Latina”.
“El contenido incluía publicaciones de apoyo a la oposición política en Venezuela y al gobierno interino de Bolivia, así como críticas al partido político del presidente mexicano (Andrés Manuel López Obrador)”, según citó a Facebook.
La operación sobre la empresa involucrada, llamada CLS Strategies, que está ubicada “a pocas cuadras de la Casa Blanca”, involucró 55 cuentas de Facebook, 42 páginas de Facebook y 36 cuentas en la subsidiaria de intercambio de fotos de la compañía, Instagram, dirigidas a audiencias en Venezuela, México y Bolivia”, indicó el diario norteamericano.
Un socio de CLS Strategies, Juan Cortiñas, citado por The Washington Post, justificó que la firma promueve “elecciones libres y abiertas, y se opone a regímenes opresivos”.
Entretanto, el jefe de Política de Seguridad de Facebook, Nathaniel Gleicher subrayó que esta red de desinformación llegó a 550 000 usuarios en las dos plataformas sociales y también involucraron 3,6 millones de dólares en publicidad.
Este escándalo del gobierno de facto de Bolivia no es el primer caso, pues ha salido a luz que Áñez contrató en agosto a una consultora de Estados Unidos para “limpiar su imagen” y atacar al expresidente boliviano Evo Morales por un periodo de tres meses.
Es más, algunas compañías de telecomunicación y agencias de seguridad estadounidenses han admitido que el flujo de información, los mensajes y el discurso agresivo contra Morales y el Movimiento al Socialismo (MAS) está direccionado desde Washington.
Además de estar involucrada en la difamación de la imagen del exmandatario boliviano, con el propósito de perpetuarse en el poder, el gobierno de Áñez enfrenta una ola de críticas por su gestión de diversos asuntos, entre ellos la propagación del nuevo coronavirus, causante de la COVID-19, el aplazamiento de las elecciones y la grave crisis económica en el país andino.