Ecologistas en Acción reclama la prohibición de la munición de plomo en todas las modalidades de caza
Ante las alarmantes consecuencias para las aves y para la salud pública de la utilización de munición de plomo, Ecologistas en Acción solicita a las comunidades autónomas, en la víspera del Día Mundial de los Humedales, la prohibición total de uso de la munición de plomo en la actividad cinegética, no solo en humedales.
La utilización de perdigones de plomo es la responsable del envenenamiento cada año de casi un millón de aves invernantes en Europa, mientras que en el Estado español en 2008 se calculó que entre 80.000 y 100.000 aves se intoxicaban cada año. Unas 60.000 aves morían. Las aves acuáticas son las especies mas afectadas, especialmente el ánade rabudo, el porrón europeo, la malvasía cabeciblanca y el ánade real.
Cada vez es más evidente que las aves acuáticas no son las únicas especies afectadas, ya que otras aves, especialmente las rapaces mas carroñeras están muriendo por esta intoxicación, como ocurre con el águila real, el águila imperial, el buitre leonado, el aguilucho lagunero e incluso el quebrantahuesos. Estas especies ingieren el plomo al alimentarse de especies cinegéticas muertas o malheridas por disparos y que llevan perdigones o fragmentos de balas de plomo en su cuerpo. Dado que estas especies cuentan con una amplia distribución por todo el territorio, la sustitución del plomo debe realizarse en todas las zonas donde se caza para asegurar su eficacia.
También la contaminación de la carne de caza con plomo, proveniente de perdigones o balas, es otro elemento de gran preocupación. La presencia de pequeños fragmentos de munición de plomo hace que, en muchos casos, no lleguen a ser retirados antes de ser cocinados. Aunque el plomo presente en la munición está en forma metálica, que es poco absorbible, durante la cocción y la digestión es parcialmente transformada en sales más biodisponibles y, por lo tanto, peligrosas. El Comité Científico de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) del Ministerio de Sanidad recomendó en 2012 a embarazadas y menores de seis años que no coman carne de caza, y a los adultos que limiten la ingesta a una ración a la semana debido a la existencia de plomo.
Por todas estas causas, Ecologistas en Acción considera necesario que las administraciones autonómicas, que son las competentes en materia de caza, prohíban la utilización de plomo en la munición de caza y que se pongan en marcha estudios para poder reducir los efectos de las miles de toneladas de esta munición que se vierten en el medio natural.