Declaración de impacto ambiental negativa para el macroproyecto eólico Ágata, entre Ávila y Madrid
- Ecologistas en Acción Sierras de la Comunidad de Madrid muestra su satisfacción por la declaración de impacto ambiental negativa del proyecto eólico Ágata, emitida por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico.
- El proyecto también cuenta con informes negativos de la Comunidad de Madrid.
- El proyecto constaba de 19 aerogeneradores de más de 200 metros de altura, en terrenos de Peguerinos (Ávila) así como una línea de alta tensión de casi 40 kilómetros de longitud que atravesaba la Sierra Oeste y la Sierra de Guadarrama, en Madrid.
- El promotor reconocía un riesgo alto de electrocución de especies de aves protegidas.
El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITERD) ha emitido, el pasado 20 de enero, y hecho pública en el Boletín Oficial del Estado (BOE) de 31 de enero, declaración de impacto ambiental (DIA) negativa para el «Parque eólico Ágata de 110 MW, con infraestructura de evacuación en Ávila y Madrid»-
El Proyecto Ágata, de los promotores Green Capital Development 51S proyectaba construir 19 aerogeneradores de más de 200 metros de altura, en terrenos de Peguerinos (Ávila). La evacuación de la energía producida se planteaba mediante la construcción de una línea de alta tensión de 37 kilómetros hasta una subestación situada en el municipio madrileño de Galapagar. La línea de eléctrica atravesaba la Sierra Oeste de Madrid y la Sierra de Guadarrama afectando a los municipios de Santa María de la Alameda, Robledondo, Colmenarejo, El Escorial, Robledo de Chavela, Zarzalejo y Galapagar.
La zona objeto del proyecto se encuentra colindante o directamente protegida por la Red Natura 2000, con la afección directa a siete zonas ZEC y ZEPA, la IBA 070 «El Escorial – San Martín De Valdeiglesias»; y afectando igualmente a Áreas Críticas de especies catalogadas como «En Peligro de Extinción»;
La DIA del MITERD considera que los efectos que provocaría el proyecto son críticos e inasumibles sobre la fauna, particularmente sobre aves y quirópteros, presentes en el territorio.
La zona donde se proyectaba Ágata se encuentra encajonada entre las citadas ZEC y ZEPA, zonas de especial protección de Red Natura 2000, de “Campos de Azálvaro/Pinares de Peguerinos” y “Pinares del Bajo Alberche”, así como otras igualmente protegidas a nivel comunitario como “Pinares del Rio Cofio” o “Cuenca del Guadarrama”.
El proyecto presentado reconocía que causaría la muerte por colisión o electrocución del águila imperial, el buitre negro y el milano real, así como de otras especies vulnerables como la cigüeña negra, el aguilucho cenizo, águila real, en porcentajes de probabilidad superiores a un 70%.
El estudio de impacto del promotor declaraba que, además, cinco especies de murciélagos catalogadas en «Peligro de Extinción» en el Catálogo Español de Especies Amenazadas (murciélago ratonero mediano, murciélagoratonero grande, nóctulo grande, nóctulo mediano, murciélago de cueva) se verían afectadas de manera drástica por los aerogeneradores y torres ahora desechados.
El proyecto vulneraba específicamente varios planes comunitarios y regionales de protección de estas especies en peligro de extinción, como el Plan de Recuperación de la Cigüeña negra, el Plan de Recuperación del Águila Imperial Ibérica. Ademas suponía un riesgo de colisión para especies catalogadas en las listas de especies vulnerables (CEEA y LESRPE) como el águila perdicera, el milano negro, generando un efecto barrera en los corredores de vuelo de estos animales.
La zona del proyecto, de especial riqueza natural, constituye además el área de campeo, alimentación y planeo de grandes aves que se verían, indica la DIA, sometidas a un impacto no asumible. El área presenta una de las comunidades faunísticas más ricas, variadas y mejor conservadas de la Sierra Oeste y de la Sierra de Guadarrama, siendo el hábitat de las especies más emblemáticas y protegidas de la zona.
El MInisterio, junto con otras dependencias e instituciones administrativas implicadas, como la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Agricultura de la Comunidad de Madrid, y organizaciones y asociaciones de todo tipo, han detectado que el proyecto presentado no presenta un análisis sólido de los impactos ni medidas adecuadas para impedir los daños que ocasionaría su implantación.
El proyecto, suscitó un gran rechazo social, tanto en la provincia de Madrid como en la de Ávila, llegándose a presentar cientos de alegaciones en contra.
Por todo ello, concluye el MITERD, “el proyecto previsiblemente causará efectos negativos significativos sobre la avifauna y los espacios protegidos, y la documentación adicional aportada por el promotor no es una garantía suficiente de su adecuada prevención, al no resolver la problemática ambiental determinada por su ubicación”.
Ecologistas en Acción Sierras de la Comunidad de Madrid que presentó alegaciones realizó describiendo los fuertes impactos que causaría la implantación del parque eólico Ágata, muestra su satisfacción por la resolución del MITERD y por los informes negativos emitidos por la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Agricultura de la Comunidad de Madrid.