Extinction Rebellion protagoniza una acción contra la multinacional SABIC en Cartagena

La organización ecologista Extinction Rebellion ha protagonizado una acción contra las instalaciones de la multinacional dependiente de ARAMCO en Cartagena. El acto «performativo» buscaba denunciar la falta de controles de emisiones en las instalaciones de la multinacional SABIC, dedicada a la manufactura de termoplásticos y otros derivados del petróleo, relacionando su actividad con los niveles de sustancias cancerígenas en las mediciones de aire en Cartagena.

Desde XR han recordado que la empresa ya cuenta con denuncias y expedientes sancionadores relacionados con emisiones de 12 metales pesados a la atmósfera, que condujo a una sanción de 52.000 euros a la empresa el pasado mes de agosto. La organización ecologista valora, sin embargo, que la sanción impuesta es exigua, comparándola con las multas millonarias establecidas en Alabama, Estados Unidos a la multinacional por los mismos motivos.

La organización ha reclamado medidas específicas de medición de la calidad del aire en Cartagena, como la instalación de un nuevo monitor de seguimiento, una demanda que, han recordado, se mantiene desde numerosas organizaciones ecologistas y ambientalistas en la región desde hace seis años. Así mismo, han exigido un estudio que fiscalice la posible relación entre las emisiones industriales y el aumento de la incidencia de cáncer entre la población en la zona.

Así mismo, XR ha aprovechado la acción para señalar directamente a SABIC por ser una empresa integrante del conglomerado petrolífero saudí ARAMCO, sosteniendo económicamente la persistancia de la monarquía saudí en Arabia.

Una empresa envuelta en problemas

La llamativa acción de la organización XR viene a coincidir con un momento convulso de la multinacional en Cartagena. Durante el mes de febrero, SABIC anunció y acometió el cierre de una de sus cuatro plantas en La Aljorra, despidiendo a más de cien empleados. La multinacional anunció de manera sorpresiva la clausura de concretamente su instalación más moderna en la región, destinada a la manufactura de componentes plásticos para la industria automovilística.

El pasado viernes, las centrales sindicales llamaron a la huelga, convocando movilizaciones en el resto de plantas a lo largo de todo el mes de marzo en rechazo frontal a los despidos anunciados por el cierre de una de las plantas.