Alberto Garzón: «Era y es una lucha de poder, burocrática, no ideológica. El proyecto político de Sánchez y Susana es el mismo.»

La actualidad durante estos días pertenece al PSOE. Por desgracia para el partido de Suresnes, lugar en el que Felipe González consiguió que su organización política abandonase el marxismo, no es protagonista por haber conseguido formar gobierno, sino por la dimisión de suya ex Secretario General Pedro Sánchez debido a una guerra interna que ha destrozado al partido. Alberto Garzón, uno de los principales líderes de Unidos Podemos y Coordinador Federal de Izquierda Unida (IU) ha comentado en Twitter que lo que la lucha interna del PSOE dirimía eran posiciones de poder, ni ideológicas. Nadie estaba poniendo en duda la reforma del artículo 135, ni la reforma laboral de Zapatero ni ninguna otra cuestión de fondo político. El reciente cambio de Pedro Sánchez para buscar un gobierno alternativo solo ha respondido a que era su única opción para seguir en el cargo.

Alberto Garzón ha publicado hace unas horas un nuevo artículo en eldiario.es titulado «Es el momento de Unidos Podemos» en el que reflexiona sobre lo que la izquierda debe hacer en la coyuntura actual. Según el político mejor valorado del país, se necesita «un proyecto que, a mi juicio, sólo puede avanzar si se reconocen las causas profundas de esta crisis. Por eso la receta no es más socialdemocracia, como tampoco lo es más populismo, sino una apuesta firme y rigurosa de izquierdas, es decir, una izquierda capaz de conectar con las preocupaciones y problemas de la clase trabajadora. Ni liturgia, ni lenguaje fosilizado e ininteligible, ni debates escolásticos, ni postureo televisivo. Lo que necesitamos es una izquierda volcada en proporcionar soluciones a la clase trabajadora, cuestión que sólo podrá hacerse mediante el trabajo desde el conflicto social«.

Para el Portavoz Adjunto de Unidos Podemos en el Congreso de los Diputados, Unidos Podemos debe trabajar para crear una organización que aglutine a la clase trabajadora, «si algo ha dejado claro esta situación en el PSOE es que nosotros teníamos razón: es una estructura orgánica al servicio de la oligarquía y, sin embargo, sostenida por militantes y votantes de la clase trabajadora que se identifican con la izquierda política. La explosión de esta contradicción puede generar un cisma de suficiente envergadura como para que la clase trabajadora de este país pueda reorganizarse en un instrumento capaz de enfrentarse a la oligarquía con éxito, así como construir un modelo de justicia social. Esa es la tarea que creo le corresponde a Unidos Podemos, la de dedicarse en cuerpo y alma a aglutinar a la clase trabajadora en un proyecto político de izquierdas, independientemente de cuál haya sido su lealtad política y cuáles sus decisiones electorales pasadas«.

El dirigente deberá esperar a ver qué estrategia define su socio mayoritario Podemos en su próximo cónclave, si uno más cercano a sus posturas representado por Pablo Iglesias y Anticapitalistas o uno más alejado como el que encarna Íñigo Errejón.