El circuito de Fórmula 1 se construirá sobre un entramado de charcas y lagunas en torno al arroyo Valdefuentes
- La zona norte del circuito de Fórmula 1 que promueve IFEMA Madrid en Valdebebas ocupará un entramado de decenas de charcas y lagunas en un área de acuíferos.
- El tramo norte de la pista de carreras invade la zona de policía del arroyo Valdefuentes, actualmente inundada.
- Los colectivos que forman parte de la Plataforma Ecologista Madrileña: Asociación para la Recuperación del Bosque Autóctono, Asociación Ecologista del Jarama “El Soto”, Grupo de Acción para el Medio Ambiente, Jarama Vivo y Liberum Natura denuncian cómo a pesar de tener la información, las administraciones, permiten construir sobre zonas inundables y sensibles e ignoran las alegaciones presentadas.

El circuito de carreras de Fórmula 1 que promueve IFEMA Madrid se ha proyectado en el perímetro exterior del recinto ferial, así como en la parcela norte destinada a su ampliación. Tendrá una longitud total de 5.474 metros y una superficie total de actuación de 1.440.062 metros cuadrados (144,01 hectáreas). Para acelerar los trámites, el pasado verano, la Consejería de Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid, sometió el proyecto a evaluación de impacto ambiental simplificada que carece de periodo de información pública y la tramitación es más rápida. Todo ello, a pesar de las alegaciones presentadas anteriormente y del grave impacto que una instalación de estas características supone para las personas y el medio ambiente urbano.

Actualmente la parcela norte está formada por terrenos rústicos, sin urbanizar pero modificadas por la actividad minera a la que se sometieron entre los años 2018-2020. Fue la extracción de arena la que generó una topografía irregular con grandes desniveles entre los vaciados o huecos y las paredes o taludes. El agua de lluvia se infiltra y recarga el terreno generándose decenas de charcas en superficie y lagunas de mayor extensión y profundidad en los huecos. El continuo de las láminas de agua puede alcanzar varias hectáreas de superficie. El agua, así almacenada, se descarga hacia los cursos fluviales en las zonas de valle, como es el caso de la cabecera del arroyo Valdefuentes, al norte del ámbito, entre las avenida Fuerzas Armadas y Alejandro de la Sota, donde se forma una gran laguna, favorecida por la obstrucción del cauce que dificulta que el agua fluya hacia el arroyo Valdebebas del que es afluente. Debido a estas circunstancias, sobre el terreno, se han generado biotopos diferentes donde pueden convivir diversidad de animales y plantas, pero la Consejería de Medio Ambiente tampoco quiso profundizar sobre estas cuestiones.
Esta red de humedales y el arroyo se encuentran dentro del perímetro de protección de aguas subterráneas en un área de acuíferos permeables por porosidad en una zona vulnerable a la contaminación, según ha informado la Confederación Hidrográfica del Tajo. A pesar de ello, la mitad norte del circuito de velocidad se construirá sobre esos terrenos y en la zona de policía del arroyo Valdefuentes que es la franja de 100 metros de anchura respecto al borde del mismo. Sobre el cauce de este arroyo, actualmente inundado, se está construyendo un nuevo edificio, fuera del ámbito del circuito de carreras pero muy próximo. El trazado del cauce de este arroyo se ha alterado y las infraestructuras de transporte obstruyen su continuidad lo que genera una gran zona de inundación.
Los colectivos que forman parte de la Plataforma Ecologista Madrileña: Asociación para la Recuperación del Bosque Autóctono (ARBA), Asociación Ecologista del Jarama “El Soto”, Grupo de Acción para el Medio Ambiente (GRAMA), Jarama Vivo y Liberum Natura recuerdan los problemas sociales, económicos y ambientales que conlleva no respetar los cauces y zonas de inundables de los cursos fluviales y humedales, como se ha demostrado en el caso de estos terrenos. Construir una infraestructura innecesaria (destinada a generar lucro privado), como es el circuito de carreras, y sobre estos terrenos, es una irresponsabilidad de las administraciones públicas, tanto del Ayuntamiento y Comunidad de Madrid como de la Confederación Hidrográfica del Tajo que lo autoriza.