Por Andalucía denuncia la expropiación de tierras a más de 100 agricultores y la sustitución de 100.000 olivos por megaplantas fotovoltaicas
- Tal y como está estipulado en los presupuestos de la Consejería de Industria, Energía y Minas 2025, localidades como Lopera, Marmolejo y Arjona en Jaén, junto a otras en Córdoba, serán sometidas a una expropiación forzosa “por razones de utilidad”. Se trata de zonas dedicadas al olivar y que verán este paisaje sustituido por megaplantas fotovoltaicas que los convertirán en “la pila de Europa”.
El Grupo Por Andalucía ha llevado a la comparecencia sobre los presupuestos de 2025 presentados por la Junta de Andalucía, la expropiación de tierras a más de 100 agricultores y la sustitución de 100.000 olivos por megaplantas fotovoltaicas. Se trata de un proyecto promovido en una zona propuesta para ser declarada Patrimonio Mundial de la Unesco bajo el nombre de Paisaje del Olivar Andaluz. De hecho, al coste medio ambiental se suma el económico ya que estas localidades verán su principal actividad arrasada por un proyecto que podría convertirlos en “la pila de Europa’’ dejando su beneficio en el extranjero, reprochaba la diputada Esperanza Gómez.
“Seguro existen otros terrenos en Andalucía que puedan destinarse a este proyecto. Sin recurrir a un proceso de expropiación forzosa que está siendo muy doloroso para muchas familias”, insistía Esperanza Gómez Corona al consejero de Industria, Energía y Minas. De hecho, según ha explicado la diputada de Por Andalucía, se trata de un proceso que se está llevando a cabo en contra de los propietarios y que una vez se instalen las placas solares apenas dejarán trabajo en las regiones.
Jorge Paradela, consejero de Industria, Energía y Minas, argumentaba que el porcentaje de territorio andaluz que se dedica a fotovoltaica es muy pequeño y que la Consejería tiene como objetivo el impulso del autoconsumo energético pero tal y como expresaba Gómez Corona: “A las familias andaluzas afectadas les da igual que el porcentaje de territorio dedicado a energías renovables sea el 2, el 3 o el 40 por ciento.”, afirmaba la diputada.
Esta crítica llevada a cabo por el grupo Por Andalucía plantea una cuestión subyacente aún más significativa y es que impulsar un sistema energético sostenible no puede ir en contra de los intereses locales y la conservación del patrimonio natural. En un momento donde el cambio climático está más presente que nunca en nuestra actualidad inmediata, la Junta de Andalucía no puede olvidar el valor ecológico y económico que aporta el paisaje del olivo y que muy difícilmente podrá superarse por un macro proyecto que quiere exportar energía fuera de la comunidad, por muy limpia que esta fuente sea.
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