La sexualidad en España sigue siendo un tema tabú en numerosos ámbitos: familiar, social, político… y con ello acarrea problemas como el que nos enfrentamos ahora mismo: una ola de infecciones de transmisión sexual, las conocidas como ITS.
Hace años era común que se retransmisializaran campañas de concienciación sobre el uso de protección en el sexo como el condón, pero siempre fue enfocado hacia el VIH. El virus estaba en un punto entre la población muy preocupante y se le ha puesto empeño y trabajo para acabar con él. Son grandes los avances frente al virus del VIH el cual ya no llega a desarrollar la enfermedad del sida en la mayoría de los casos gracias a los retrovirales. Pero en cambio, infecciones como son la sífilis o la gonorrea han sido “olvidadas”.
La Organización Mundial de la Salud cambió la terminología de enfermedades a infecciones por una razón fundamental: algunas personas pueden ser asintomáticas pero estar infectadas. Este es uno de los principales problemas a la hora de combatir los cada vez mayores casos de ITS en el país. Una menor conciencia del problema a causa de no percibir una enfermedad mortal o con sintomatología a la que temer como ha ocurrido con el sida, el VIH o la pandemia que aún continuamos sufriendo por COVID-19.
Se le suma a este motivo la educación sexual. Los expertos advierten de que continuar manteniendo el tabú frente a la sexualidad, sobre todo en los primeros años de la adolescencia, es un error.