La CGT considera que los Planes Generales del Estado perpetúan la estafa por sexto año consecutivo
Es una vergüenza decir que estos son los presupuestos “del crecimiento económico” cuando el Estado español acata las políticas de austeridad y recortes de Bruselas y la Troika.
La Confederación General del Trabajo (CGT) ha criticado que cada año, se ingrese lo que se ingrese, los banqueros y el capital financiero tengan garantizados su rentabilidad ilegítima a costa del gasto social. Los PGE de 2017 han basado el techo de gasto aprobado en el ejercicio del pasado año por casi todo el elenco parlamentario, lo que significa que el recorte ya estaba incorporado.
Por sexto año consecutivo, el Ejecutivo español asume las políticas fiscales y presupuestarias establecidas desde Bruselas para cuadrar el déficit público, donde la deuda no la están pagando el sector financiero y bancario, verdaderos culpables de la situación en la que nos encontramos, sino aquellos colectivos sociales más empobrecidos.
La CGT cree que con estos presupuestos las trabajadoras de las Administraciones Públicas financiarán los beneficios de banqueros y grandes corporaciones, perdiendo poder adquisitivo. El empleo público, “defendido” por las burocracias sindicales del régimen no es empleo nuevo ni podrá garantizar servicios eficientes y de calidad, por no hablar de los miles de trabajos suprimidos en educación, sanidad, dependencia, cultura, investigación, etc.
Del mismo modo, la CGT ha criticado duramente que estos presupuestos no recojan partidas económicas suficientes para luchar contra el Terrorismo Machista, para las personas más jóvenes en edad de estudiar, las refugiadas, las desempleadas y para todas aquellas que sufren la exclusión en nuestra sociedad.