Ecologistas denuncian los reiterados vertidos de aguas fecales y residuos al río Jarama
El Jarama a su paso por Coslada y San Fernando de Henares se ha convertido en un inmenso vertedero de plásticos, toallitas, compresas y bastoncillos de los oídos que se tiran por el inodoro y van a parar al río. Las lluvias de las pasadas semanas han arrastrado grandes cantidades de estos materiales que atoran los colectores que desaguan en el río. La Asociación para la Recuperación del Bosque Autóctono (ARBA), Asociación Ecologista del Jarama “El Soto”, Ecologistas en Acción, Grupo de Acción para el Medio Ambiente (GRAMA) y Jarama Vivo, consideran urgente y necesario la construcción de estanques de tormentas que retengan estos vertidos y anuncian la interposición de denuncias.
En Coslada hay una docena de colectores que desaguan al río Jarama. Se usan como aliviaderos para los momentos de fuertes lluvias. Los aliviaderos son dispositivos que permiten derivar el caudal que excede de la capacidad de transporte de la red de saneamiento o de la capacidad de tratamiento de la estación depuradora, a otros puntos de la red, en este caso, al cauce del río Jarama.
El resultado es que el río Jarama, a partir del puente de San Fernando de Henares, en la autovía A-2, se ha convertido en una cloaca a cielo abierto. Las orillas aparecen cubiertas de plásticos, toallitas, compresas, bastoncillos de los oídos. Se nota un fuerte olor en toda la zona y se percibe una degradación generalizada. Todo ello supone un riesgo sanitario para las numerosas personas que residen en el Barrio de la Estación de Coslada, el más afecatado. El Ayuntamiento de Coslada ha tenido que utilizar maquinaria pesada para retirar los residuos acumulados en la zona de la presa de San Fernando de Henares.
El tramo fluvial afectado, está considerado espacio protegido Red Natura 2000 y forma parte del Parque Regional del Sureste. Además, estas aguas se emplean para riego agrícola en San Fernando de Henares y otras localidades, de hecho el principal canal de derivación se encuentra en esa zona de vertidos (presa de San Fernando).
A pesar de que se vulneran varias normativas de protección y de conservación, ninguna administración quiere intervenir frente a estos hechos y las denuncias que vienen presentando, desde hace años, los colectivos ARBA, la Asociación Ecologista del Jarama “El Soto”, Ecologistas en Acción, GRAMA y Jarama Vivo, son ignoradas. La Consejería de Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid, encargada de la conservación de los espacios protegidos ni siquiera responde a las denuncias. La Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT), que tiene encomendada la calidad del río y sus aguas, considera normal esta clase de vertidos.
Porr ello, las organizaciones ecologistas exigen que se ponga fin a esta situación. Van a presentar denuncias ante las administraciones implicadas en la conservación del territorio y el río (Consejería de Medio Ambiente, CHT), así como ante aquellas con competencias sobre el funcionamiento de las redes de saneamiento y la depuración (Canal de Isabel II y ayuntamientos). Los colectivos ambientalistas no descartan la comunicación de los hechos a la Fiscalía de Medio Ambiente si esta situación se sigue reproduciendo en el futuro. Como ya se hace en otros lugares es urgente que se construyan en la zona los estanques de tormentas que retengan estos vertidos.